Critiquita 102: La flauta de los pitufos, Peyo, Planeta DeAgostini 2006

Por fin, por fin! POR FIIIIIIIIN! La espera se me había hecho muy larga. Primero su retraso de mayo a septiembre y después a sufrir por un error de la distribuidora que dejó desabastecidos de la 1º entrega del coleccionable, no sé si a Madrid entera, pero desde luego si a todos los kioskos y tiendas especializadas del centro (que es casi como decir la mitad de las tiendas) de esa ciudad. Una auténtica jodienda, y más porque ahora toca esperar a ver cuando la cachonda de la distribuidora decide distribuir la primera entrega.

En fin, soltada ya la bilis, tenemos una aventura de Johan y Pirluit (más le vale a PDA repensárselo y sacar sus aventuras si no quiere arder), pero no una cualquiera, sino en la que aparecieron por primera vez los pitufos, los PITUFOS! Esta historia (en el original "La flauta de los 6 pitufos") gira entorno a una flauta mágica, una flauta de 6 agujeros que hace bailar hasta la extenuación al que la oye. Como cae en malas manos, los héroes Johan y Pirluit han de "rescatarla" y a ello le ayudan los pitufos, que son los fabricantes de esa flauta (que por cierto nunca más sale, ni siquiera en las aventuras de los pitufos en solitario).

Peyo es el autor completo (para los puristas el estudio de Peyo) y ya desde la primera página descubrimos a un maestro. Con un dibujo sencillo, pero con los detalles suficientes, caricaturesco, alegre y desenfadado nos muestra de manera competente una Edad Media limpia y un reino de cuento (con su rey viejo y campechano, su mago bueno, etc.). Un gran dibujo cuya sencillez no menosprecia los fondos y que alcanza la vida mediante una narración impecable. Lo mejor de esta obra para mi, es eso, la narración. Magnífica, Peyo despliega y demuestra una gran narración dinámica, ágil, pristina, siempre adecuada, que como dije da viveza a las pj y al guión, en fin, mejor no puede ser. Sólo hay que ver las páginas mudas, sobre todo ese duelo del final, sencillo pero no por ello nada apoteósico. Casi que se podría decir algo parecido a lo que dijo Miguel Ángel a su "David", en vez de "anda!", habría que decir, "habla!" (quizás ha llegado el momento de otra pastillita).

El guión también esta al mismo nivel que el apartado gráfico, desde la genial sencillez del argumento (una flauta mágica) hasta el desarrollo perfecto de la historia, pasando por un guión lleno de gags y bromas (casi una por página), que no han perdido la gracia después de mas 40 años. Un guión magnífico que retrata muy bien a los pj, ofrece una visión acertada, a pesar de la sencillez y el estereotipismo empleados, del feudalismo, riquísimo en creatividad e ideas, como demuestra el enorme potencial que demostraron tener unos secundarios creados exprofeso para esta historia. En suma, un guión genial, superentretenido y divertido, de lectura ágil y rápida que, aunque esta destinado a un público preadolescente, nunca parecerá ñoño o simple a un adulto, porque esta obra es un clásico, es decir, es imperecedera y universal.

La edición perfecta, barata, sencilla, cómoda de leer y con presencia. Para mi una sorpresa, no por eso, si no porque yo leí los pitufos (y a Johan y Pirluit) en la edicion de Bruguera, que es de tamaño menor, tapas blandas, un papel satinado y una tipografía de la época, mecánica e impersonal. Así que leer los pitufos a tamaño grande y con una rotulación desenfadada y con un poco de personalidad ha sido algo nuevo para mi. Por cierto, los pitufos volvieron a aparecer en otro cómic de Johan y Pirluit, ahora no recuerdo el título lo siento, que no va a publicar PDA. Una falta que esta editorial espero que subsane, editando a Johan y Pirluiiiiiiiiit!!

Pues bueno, creo que ya se me ha visto el plumero. Los pitufos me encantan y aunque hace más de 10 años que no los leía, fueron los cómics que mas leí en mi infancia, prácticamente 2 veces al año durante no sé, poco más de 10 años. Me los leí más veces que Asterix, que Tintín, que Luky Lucke, que cualquier cómic que tenía en aquella época. Son geniales, endiablademente entretenidos, divertidos, fascinantes (ese universo de 100 estereotipos inmutables en el tiempo, una sola pitufina, etc.), innagotables (da igual que te los sepas de memoria), en fin, lo mejor de lo mejor. Absolutamente recomendables. Un gran placer poder tenerlos en una edición nueva, más resistente y menos desgastada por el tiempo. En fin, he vuelto a disfrutar con los pitufos y con Johan y Pirluit (que me gustan más) a lo grande, y lo mejor es todo lo que me espera.