Este fue el cómic que me introdujo en el UDC. Hasta entonces, había vivido alegremente de espaldas a ese universo. KC me hizo ver que el UDC es un lugar muy atractivo (y Power Girl, llamadme raro, pero hasta el momento es la versión, de las que he visto, que más me pone), cosa que confirmó la JLA de Morrison y por eso, desde ese momento he intentado poner un pie en ese universo.
Recuerdo que lo ojeé en la tienda y quedé deslumbrado por él. En el momento en que vi a Superman con barba canosa, vestido de granjero y en actitud crepuscular decidí comprármelo a pesar de mi ignorancia sobre lo que iba a pagar, ni siquiera los autores me sonaban y el estilo de Ross es un estilo que nunca me ha gustado, pero aquí parecía estar bien. Pocas veces un vistazo me ha inoculado tantas ansias de compra.
KC es una historia alternativa del UDC. En ella, los superhéroes tradicionales se han retirado desplazados por la gran cantidad de superhéroes nuevos que han surgido después y que conectan mejor con el público. Cuando esta gran cantidad de superhéroes provoca el caos, los superhéroes tradicionales capitaneados por Superman, regresan para arreglar la situación.
Waid en KC se marca una metahistoria, ya que la inspiración de la misma surge de la situación en aquellos momentos de los superhéroes. En mitad de los 90, los superhéroes tradicionales habían recibido una buena patada en el culo por parte de nuevos superhéroes cuya novedad era una actitud poco respetuosa con los valores del género vigentes hasta ese momento. De esta forma, Waid convirtió la lucha que había en esos momentos en el mercado, en una historia interesante y bien construida. Es sencilla, pero como Waid la desarrolla con ritmo y aumenta hábilmente la tensión, mantiene el interés. Es un guión muy competente que sigue resultando entretenido y cuenta con buenos momentos y detalles. Incluso sigue conservando su originalidad, pues gira entorno a argumentos que no se suelen ver en el género y presenta a los superhéroes desde una óptica inusual, así que sigue siendo interesante y fresca. Pero la historia en su día me gustó más de lo que lo ha hecho en esta última relectura.
Cada vez que la leo, más convencido estoy de que esta de más el párroco. Es mi problema con los pjs puente entre lo que se narra y los lectores. No necesito nadie con el que identificarme para disfrutar con una historia, así que me cargan. Además, toda la movida del juicio para luego nada. Me parece que no aporta algo interesante a la historia y quita espacio para desarrollar más lo interesante e importante del guión, que es el conflicto intersuperheroico y el conflicto personal de Superman. En mi opinión, el guión de Waid estaría mejor si se hubiese centrado más en el conflicto y dejado de emular a "Marvels". Lo que ya no sé es si la conclusión del cómic es la solución de Waid a aquel conflicto editorial o, solo hay metacómic en el argumento.
Por eso, para mi, en KC, Ross es el mejor de los autores. Su estilo no me gusta, no es que no me guste él, es que el estilo hiperrealista no me gusta nada porque me parece frío, estático y artificioso. A mi me gusta el dibujo como interpretación de la realidad no como imitación de la misma. Pero tengo que reconocer que Ross fue la mejor opción para el guión de Waid, porque su estilo, además de hiperrealista, es bastante clásico, es decir, sereno, idealista y equilibrado. Un estilo que bebe del Clásico, es decir, de un estilo desarrollado para representar dioses y personajes ejemplares, héroes. Por eso, Ross era el mejor para plasmar a los superhéroes tradicionales con la nobleza y la dignidad que precisaba el guión. También, con el espléndido diseño del futuro alternativo que se marcó, demuestra que era la mejor opción. En esta faceta clave estuvo muy creativo y acertado, tanto, que muchos de sus diseños han sido adoptados por el UDC normal, y trabajador. Sin duda fue mucho curro, ya que tuvo que diseñar un montón de pjs (si bien bastantes a partir de diseños ya hechos), aunque muchos de ellos sólo iban a salir una vez, y de lejos, pero era necesario para hacer vívido el futuro alternativo que es KC. Por eso, este trabajo más el de "Tierra X", hacen de Ross el 2º mejor diseñador de superhéroes de la Historia. También su hiperrealismo le hacía idóneo para KC. Ya que, si el guión de Waid se hubiese dibujado con el típico estilo sintético idealista del género, no habría resultado el cómic tan conmovedor y cercano. Pero a pesar de todo eso, pienso que Ross falla. KC va de un conflicto, por lo que este no se puede contar bien sin aportar gráficamente tensión y dramatismo y justo, esas 2 facetas son las carencias del estilo de Ross. No es un narrador dinámico (seguramente por basarse en fotografías), sus viñetas de pelea son meramente funcionales y sus figuras, por el hiperrealismo, salen congeladas y poco expresivas, así que su trabajo siempre resulta frío y artificioso. Por eso, esta mejor al principio y al final, obviando alguna viñeta espectacular de la parte de en medio. Así que, aunque plasma excelentemente la atmósfera, el decorado de la acción, no le da a KC el dinamismo y tensión que necesitaba, perdiéndose, por aquí también, parte de la potencia de la historia.
Por todo ello, es un cómic que el tiempo ha puesto en un sitio menor del que estaba al principio. Hoy Ross no resulta tan espectacular pues, como no ha cambiado su estilo, esta ya bastante visto, por otro lado, el guión de Waid no parece tan ruidoso y homenajeador, pues esa época ya ha pasado y muchos no la vivieron. Es, pues, el típico cómic correcto que podría haber estado mejor. También es un cómic friki, pues parte de su disfrute esta en ver el futuro alternativo del UDC y para eso, hay que conocer el presente del UDC, conocimiento que no todos los lectores tienen.
A pesar de que "artísticamente" es modesto, KC es una de las obras más influyentes del género. La rebelión Image hizo tambalear los presupuestos del género, por lo que, lógicamente, provocó que los autores reflexionasen sobre ellos a través de los pjs. En esa línea, en la que aún estamos, que empezaba aparecer, KC fue una obra muy axitosa, por lo que avaló ese enfoque. Por otro lado, el conflicto intersuperheroico que se plantea va más allá del tradicional provocado por malentendidos (del cual tanto nos reímos ahora) o manipulaciones. Le da un trasfondo ideológico que aún continua pues llega hasta CW, en muchos aspectos una copia (el Gulag es la prisión en la Zona Negativa, en ambos, los superhéroes se organizan en una asociación que los agrupa a todos). También es una obra muy influyente gráficamente. No sólo por el aspecto antes comentado de que sus diseños (y pjs) nuevos han sido fagocitados por el UDC canónico, sino que el estilo hiperrealista de Ross abrió las puertas a ese estilo hoy tan practicado e injustamente exitoso (McNiven, Horn, ciento y la madre de portadistas, etc.) aunque con técnicas diferentes. Algo nada fácil en un medio tan poco dado a la innovación y al cambio como la industria de entretenimiento. Por tanto, aunque KC es uno más en cuanto a calidad, es uno de los comics clave del género.
Comentarios
De ahí que Marvels y KC compartan la intención de ensalzar al superhéroe clásico.
PD: ¿Quien es el mejor diseñador de superhéreos de la historia?, ¿Kirby?, me has dejado con la duda.
Bueno, gracias por aportar el dato de coargumentista.
Coincido contigo Fer en líneas generales, pero el párroco y la frialdad y la artificiosidad del estilo Ross no es que la quiten calidad, es que la impidieron ser mejor. Fíjate la potencia que tiene Leon en Tierra X, aquí todo te deja bastante frío (una vez leída la historia varias veces y una década después).