Esto de que salga un libro de Quino por Navidad se esta convirtiendo en una tradición más de estas fiestas. Esta bien, pero por otro lado es un poco lamentable que este autor necesite el consumismo navideño para ser rentable en España. En fin, como soy un gran admirador de este humorista, me lo han regalado.
Me encanta Quino, pero no el de "Mafalda," que no es que este mal, es que no me gusta tanto. Quino como humorista al uso (es decir chistes gráficos sin continuidad) me parece tremendo en todos los aspectos, desde su grafismo hasta su humor. Creo que en lo suyo, es un autor completísimo e impresionante.
Este libro es uno de los primeros que publicó (lo que quiere decir que sólo nos llega cuando ya no hay nada de él nuevo que editar). Tiene bastante material inédito (algunos chistes estan contenidos en otros libros posteriores en el tiempo pero anteriores en nuestro país ... La edición española es realmente marxiana, me refiero a los hermanos). En él, podemos apreciar a un Quino que aún no tiene decidido su estilo, de forma que podemos ver como emplea recursos gráficos que acabaría abandonando en su proceso sublimador estilístico, que culminó en una sobriedad y sencillez muy elocuente y expresiva (a veces me pregunto de dónde me salen estas frases?) que conocemos ahora.
Aquí tenemos el fin de ese proceso, puesto que su dibujo sencillo, geométrico, minimalista y caricaturesco, muy atractivo y completo, esta ya totalmente madurado. Lo mismo que su narración, aunque produce mayoritariamente chistes de una sola viñeta, los narrativos son una gran minoría. Su narración magnífica, por el control perfecto del ritmo y su potencia expresiva, esta aquí también totalmente madura. Lo único que hay, es que aún no se atrevía a quedarse sólo con el b&n. Utiliza grises y otros recursos para no hacer humor gráfico en b&n. Lo cual es una de sus señas. Sus chistes son siempre austeros en detalles y reducibles a masas de negros y blancos, con predominio de estas últimas, lo que aumenta la expresividad de su laconismo y ayuda a caricaturizar las situaciones que utiliza para hacer reír (lo he hecho otra vez?). Un estilo que demuestra su talentoso sentido estético y su pericia artística, puesto que sus chistes tienen el valor añadido de ser hermosos (es uno de mis dibujantes favoritos).
En el tema del humor este libro también esta a la altura de los demás e incluso diría que es uno de los mejores. Aquí Quino ya esta hecho. Estan sus temas de siempre y sus recurrencias de siempre. El envejecimiento, el Psicoanálisis (es argentino), el Matrimonio de maduros y sobre todo, la relación patrón-asalariado (trasnochada y panfletaria hoy en día su visión del tema), el progreso, la relación ricos-pobres y como el dinero transforma la Justicia en Injusticia. Es un autor, pues, progresista. Sus chistes siempre hacen una caricatura grotesca y muy crítica al capitalismo liberal y a la sociedad despersonalizada moderna y ridiculizan lo burgués. Lo hacen con un humor intelectual (casi siempre implícito), que recurre casi siempre a la reducción al absurdo y a la ironía, cuando no se escurre hacía el surrealismo. Por tanto, más que un autor de carcajada, es un autor de sonrisa y de hacer reflexionar. Un autor que ensalza las pequeñas cosas y los buenos sentimientos y odia la avaricia, la crueldad y la ambición porque, al deshumanizar a sus portadores, se extiende al resto de la humanidad por el trato deshumanizador que provoca, al valorar a la gente por su rentabilidad.
En suma, este libro de Quino, como los demás, es un libro crítico, incluso ácido con la sociedad occidental, que trata de alertar sobre la deshumanización que ha traído la modernidad. En fin, nuevo muy buen libro de Quino (no le conozco uno malo), donde demuestra que, desde hace muchos años, es un gran humorista, seguramente el mejor hispano de todos los tiempos. Un autor genial porque, como los grandes humoristas, lo que hay debajo de sus chistes, es un preciso, crudo y certero análisis sociológico y psicólogico y un emotivo alegato humanístico. Un autor que sin complejidades y haciendo reír (hay alguna habilidad mejor que esa?) hace reflexionar e introspeccionar a los lectores. Los buenos libros hacen mejorar a la sociedad, los de Quino lo hacen, luego ... En este sentido, son los mejores para conseguir ese quimérico objetivo que persigue la Educación para la Ciudanía. Leed estos libros, no sé si serán fácilmente encontrables (yo llevo coleccionándolos desde que tengo uso de razón), cualquiera esta muy bien. Yo guardo el mejor recuerdo de "Quinoterapia" (humor sobre médicos) y "Potentes, prepotentes e impotentes" (el título y su estupenda portada ya dan una idea de su brillantez).
Comentarios
Bueno, te he investigado en profundidad. ¡Todos los trapos sucios de tu infancia al descubierto en la colmena!
Mañana los de tu complice. Ese no se salva, menudo cabrito, ya sabemos que suele lee Ortega y Pachecos del Pedro Vera en los descansillos de parroquias, bibliotecas y otros templos del Orden público.
¡¡¡Qué lo borren del Tebelogs a la de ya!!!
Tití Ribiera, El muy desnudo Abultador del Alan Moore.
Ismael, el Tití Ribiera.
gracias