Pues al final no es tan mala como se decía. Es normal, o sea, mediocre. Creo que todas las críticas recibidas, ni siquiera los habituales y desnortados palmeros de Bendis han salido a revindicarla, se deben más al cansancio y a la percepción de que esta historia es irrelevante que a su ausencia de calidad. Críticas como que no mola porque Ultrón apenas sale son un ejemplo de la estupidez de las mismas.
Tras leer la historia me viene a la cabeza lo siguiente: alguien en el sitio donde se deciden las películas Marvel decidió hacer una peli sobre Pym. Por qué? Porque Iron Man funciona y como la compañía no puede recurrir a Reed Richards porque no tiene sus derechos cinematográficos, el turno le ha llegado al 3º supercientífico de Marvel a pesar de que en los cómics es un personaje en decadencia y nadie de fuera del gueto lo conoce. Tomada esta decisión había que hacer algo con él en los comics para devolverle la grandeza ya que su nombre empezaría sonar. Con esta idea fueron a Bendis, el guionista estrella de Marvel no sé por qué, y le mandaron hacer una historia, después de todo era el guionista de los Vengatas y Pym es uno de sus miembros clásicos, que revindicase al personaje. Bendis lo pensó y decidió que la mejor manera de contar porqué este personaje es importante en Marvel era versionar Cuento de Navidad, el célebre cuento de Dickens. Contar cómo sería el Universo Marvel sin Pym era la mejor manera de revindicarle (quizás se ha pasado con eso de que sin él primaría la magia en la Tierra Marvel). Genial idea que aplaudo, lo único del trabajo de Bendis en esta historia, que no ha sido buena, aparte de por estar guionizada por él, por los mandatos editoriales, la sorpresa de los New52 y la falta de explicaciones tanto para demostrar la importancia de Pym como del radical cambio en la física del cosmos marvelita, las consecuencias del evento. Se entrevé que La Era de Ultrón en origen era otra historia más de Ultrón contra Vengadores con vistas al Cine (Pym es un personaje que, aunque no ha sido olvidado, ha pintado poco en la Era Quesada) que fue ascendida repentinamente a evento marvelita y así fue perjudicada porque sus mimbres eran bien modestos. Tanto como las capacidades de su artesano.
La Era de Ultrón es mediocre porque así son casi todas las historias que nacen por deseo editorial. No importa la habilidad o el talento de sus autores porque se les impide crear con libertad al darles una premisa y exigirles una serie de peajes cuya única razón de ser es económica (tienen que ser estos personajes, tiene que pasar estas cosas, no puede pasar esto...). Sin embargo, esto no disculpa a Bendis, un tipo audaz, gracioso y gran dialoguista, el mejor que ha tenido Marvel tras Lee, pero torpe escritor. El calvo siempre ha fallado en el desarrollo de la historia. Es bueno con el principio, estableciendo el tono, desplegando el tablero, pero en cuanto pasa al nudo se atasca así que el avance de sus historias siempre es forzado. Por ejemplo, todo lo de la huida del moribundo Cage, cómo que consigue, en una NY arrasada y dominada por Ultrón, un avión operativo y es capaz de pilotarlo casi de polo a polo sin que el androide se entere? Las palabras que usa para explicarlo, no sabe cómo, no las dice Frost, las dice Bendis. No sabía como hilarlo de forma coherente (además no era necesario forzar así las cosas porque lo que averiguó Furia ya lo sabía, luego no son necesarios las 1ª 4 grapas). Este problema hace que sus historias nunca lleguen al final de forma orgánica. Es así incluso cuando él es el que decide (ver Powers una serie de polis donde nunca se resuelve un caso investigando). Esto seguramente está relacionado con su vicio de alargar mucho las escenas, por ejemplo la 1ª, era necesario tanta atención/páginas al rescate de Spiderman?, o la historia de la Viuda Negra y el Caballero Luna, tanta página para lo que aportan y para no aparecer más?, y con que mete muchas cosas que luego no justifica, en este caso lo del Hulk rojo, por qué va a la Tierra Salvaje o para qué la chatarra que lleva que ha costado varias muertes y cuya consecución duró 8 preciosas páginas? Por qué nadie intenta detener a Lobezno? Los 2 primeros ejemplos juntos son una grapa entera cuando claramente no son necesarias para la historia. Se la puede entender sin ellas, hagan la prueba, y, además, no aportan nada nuevo a la parte emocional que todo buen relato debe tener. Lo mismo, a otra escala, pasa con las grapas 7 y 8. Podrían ser 1 perfectamente. Con 2 grapas menos La Era de Ultrón hubiera resultado mejor porque hubiera sido más intensa. Todo lo anterior, que es marca de la casa igual que el abuso de los clichés y de la comicidad, parece que es por falta de planificación, lo que no sé es el porqué de eso. Tampoco sé porque un papanatas así ha triunfado. Todo apunta a que es porque Bendis no se para a pensar o a repasar y siempre prima lo molón sobre lo coherente. Aunque los estadounidenses lo ignoran, lo segundo potencia lo primero. Esta insuficiencia del calvo afecta enormemente a La Era de Ultrón pues al final no resulta sólida y tenía que serlo sí o sí pues es un evento con consecuencias y no una historia que puede ser ignorada por todo el mundo. Otra razón que hace a Bendis un mal guionista de cómics es que escribe sus textos como si fuesen un guión para una narración audiovisual. Es extraño que aún no se haya dado cuenta de que el lenguaje audiovisual no es el del Cómic. Ver no es igual que leer. Ni una página ni una viñeta equivale a un lapso temporal. Así, no es lo mismo una escena muda en una narración audiovisual que en una grapa mensual. Cuando lees mensualmente algo que sólo tiene 20 páginas no puedes dedicar páginas a escenas que no tienen peso narrativo o incluir escenas largas mudas. El continuará y la brevedad exigen otras herramientas para conseguir la espectacularidad, la emoción y narrar la acción pura y dura. Por culpa de esto las grapas de Bendis siempre resultan inanes y ligeras. Da igual que sean de acción o conversacionales, se leen en lo que dura un pedo, si bien hoy su lectura dura un poco más, con el agravante de la ausencia de información relevante que dé la sensación de que está ocurriendo algo, en las historias del calvo siempre pasa poco. Esta querencia le viene porque le importa más el tono y la sensación que lo demás, por eso disfruta con los principios y por estos estos siempre están hiperdesarrollados (en esta historia de 10 grapas el principio dura la mitad, 5) de modo que sus historias están desproporcionadas, los comienzos siempre son demasiado grandes para los breves nudos y precipitados desenlaces que los rematan. Esto hace que las decisiones de Bendis nunca estén fundamentadas de modo que el lector siempre se queda con la sensación de que las cosas también podían haber ocurrido de otro modo. Por eso los planes de los personajes, o son estúpidos o simples, como en esta historia el de Furia, o funcionan porque sí ya que si no la historia no terminaría, como en esta historia el de Stark. Todo lo anterior explica que los guiones de Bendis estén llenos de tontás e incoherencias. Aquí: Furia nunca dejaba nada por escrito, parte central del nº 2 EE.UU., y luego, parte final del siguiente, aparece un papel suyo con su plan antiUltrón; Pantera descalabrándose en una caída al final del nº 3 EE.UU., alguien sabe de un felino al que le haya pasado eso?; Hulka interrumpiendo el plan, es que Cage no habría salido por su propio pie tras hacer la entrega?, al principio del nº 4 EE.UU., no habría resultado mejor (y más interesante para la historia) aliarse con un villano para hacer eso?; los superhéroes escapando de los robots de Ultrón en NY gracias al poder de invisibilidad de la sra. Richards al final del nº 4 EE.UU. para luego decir que la invisibilidad es inútil contra él al principio del nº 6 EE.UU.; que el búnker de la Tierra Salvaje está hecho tras la invasión Skrull, se dice en la parte central del nº 5 EE.UU., pero al principio del nº 7 EE.UU., en los 60, aparece totalmente construido (quizás esto sea un fallo del editor) y que este esté protegido contra poderes psíquicos pero que su cerradura sea fácil de encontrar y que en un mundo de Hulks su puerta no esté hecha aprueba de Hulks (principio del nº 5 EE.UU.); que los personajes nunca sean detectados antes de llegar, cuando conviene a Bendis claro, por eso sí en las partes centrales de los nº 6 y 7 EE.UU. pero no al principio del 6 y eso que van en un vehículo robado a Furia, este podría haberlo denunciado ipso facto, no hay radares? no se ve desde lejos a los objetos volantes?; que Logan diga en la parte central del nº 7 EE.UU. que es inútil escapar de su olfato, no importa la distancia ni los olores que lo camuflen, pero poco después, al final de ese nº, es incapaz de darse cuenta de que el puño de la Cosa le espera al otro lado de una puerta, y por último (dicho sin ánimo exhaustivo), el que en el futuro sin Pym, Stark tenga las imágenes del asesinato daquel dónde se reconoce a la sra. Richards y a Lobezno (principio del nº 8 EE.UU.), cómo es que nunca hicieron nada contra ellos? Por eso leer a Bendis que se lo ha currado mucho, o leer a Clemente loando a este por el curro que se ha pegado, resulta ridículo. Menos perder el tiempo en chorradas y más pensar en lo que se está escribiendo.
Lo que hace relativamente interesante a La Era de Ultrón son los temas del intervencionismo y de las consecuencias. El primero es consustancial a los superhéroes. Cuál es el límite de su intervencionismo? Casi desde el principio ha sido la moral, por eso son conservadores. Los superhéroes mantienen el status quo porque esperan que la sociedad se arregle a sí misma pues consideran al Sistema como válido pues sus fallos se deben a los excesos de los vicios humanos, que es lo que combaten (la codicia desmedida, el impulso asesino, el ansia de dominación...). En esta historia Lobezno va contra todo eso ya que plantea un viaje temporal para deshacer un presente que no les gusta (presentado tramposamente pues está dominado por un exterminador de modo que así queda justificada la crueldad y la injusticia de tal acto, ejecutado justo cuando parece que no hay esperanza, pues Ultrón no es culpa de Pym del mismo modo que el hijo no es culpa del padre, con esa forma dentender las cosas empezó la Edad Contemporánea, pues ambos son entes libres e independientes, los pecados-delitos de uno no pueden ser responsabilidad del otro). Con ello viola las leyes superheroicas (y por ese acto de hybris es castigado con la muerte, ecos de tragedia griega tiene esta historia, quién lo iba decir de Bendis), las cosas se hacen como dice Furia o como planea Stark porque, como muy bien explican los más listos del Universo Marvel, hay tantas cosas en el pasado que cambiar que sería una tarea sin fin. La razón por la que no hacemos lo que nos venga en gana cada vez que las cosas no van como queremos es que no podemos. El fondo de la cuestión es que lo adulto es aguantarse con la sucesión temporal. La transgresión de Lobezno se explica porque los superhéroes se sienten abatidos, pesimistas e inútiles, es decir, no piensan con claridad y racionalidad, todo razonable salvo porque Bendis olvida que por definición el héroe es tenaz y optimista por lo que, aunque derrotado, no se deprime. Así pues, esta historia está construida por el choque entre tradición (puritanismo) y modernidad que afecta últimamente a la sociedad estadounidense. Por qué los Vengadores tienen ese nombre tan terrible que responde a la idea antigua de Justicia? Pues por el ojo por ojo, recuerden que el puritanismo es veterotestamentario. No se puede cambiar el pasado pero sí se puede castigar, cosa que siempre es a posteriori. Por eso los superhéroes no intervienen o cambian, eso es proactivo, sino revierten o restituyen, que es reactivo. Como héroes morales puritanos conciben el mundo como bueno por ser obra de Dios, tanto es así que incluso los nativos de la línea temporal sin Pym se consideran a sí mismos como una aberración, así que cambiarlo es algo tan malvado como lo prohibido por aquel de modo que sólo se puede castigar la transgresión. El cambio no es una opción. Contra esto va Lobezno, que es la agresión irreflexiva típica estadounidense que vivió con Bush jr. su momento más álgido, pero el mundo no es simple. En un mundo maniqueo se puede pasar directamente a la acción (como muy bien señala Morrison esta palabra fue el título de la primera cole de superhéroes) porque las cosas siempre están claras de modo que no hace falta pensar, pero el género superheroico ya no es así. Por eso en La Era de Ultrón fracasa la fuerza y triunfa la astucia. La victoria es de la metis de Stark. En un mundo complejo la fuerza de Aquiles no sirve, lo que sirve es la inteligencia de Odiseo. El poder militar estadounidense/la acción destructiva hoy es inútil, sólo hay que ver lo poco que pintan en esta historia Thor y el Capi, los otros miembros junto con el latas del tridente ofensivo de Marvel para su reciente y ya muerta Edad Heroica. La astucia puede resolver, incluso prevenir, que es lo que tiene poder volver al pasado. La astucia es Prometeo, esto lo desarrollaré un poco más adelante.
Esto enlaza con lo segundo, las consecuencias de La Era de Ultrón. Estas, en contra de la costumbre, han afectado al Universo Marvel entero. Esta vez no ha sido como antes, cuando el mainstream era infantil, que la venganza de los superhéroes era limpia. Es decir, no tenía consecuencias/daño colaterales sobre el cosmos inalterable y correcto por sagrado (Busiek escribió un gran historia sobre esto para su Astro City). Como digo esta vez dejar las cosas como estaban antes de la transgresión ha afectado al Universo Marvel además de a los superhéroes, en la tradición los héroes cargan con el peso de conocimiento (que es la penitencia de Lobezno por su transgresión, el vivir con su autoasesinato en la conciencia), como los soldados. Por qué? Pues porque EE.UU. ha madurado lo suficiente como para darse cuenta de su entorno, otros opinan que su decadencia les ha hecho perder su sentimiento de impunidad. Es lo mismo. El abuso en el siglo XXI de la intervención ha hecho ver a los estadounidenses que los grandes, por tamaño, actuaciones en un mundo globalizado son como un boomerang. No se trata sólo de nosotros... No estamos solos en el Universo es la conclusión del aleccionamiento entre estertores de un Strak alternativo a un Lobezno maniqueamente interventor. Esta lección de la víctima a su ofensor, una escena muy bien plasmada por Peterson, es quizás el mejor momento de toda La Era de Ultrón. Esta toma de conciencia es la razón por la que el Universo Marvel se ha visto perjudicado. Esto nos lleva a lo dicho sobre Iron Man. La Era de Ulrón es la razón de la misteriosa hostilidad de los imperios galácticos a la Tierra que se nos está narrando principalmente en Iron Man y en los Guardianes de la Galaxia (no por casualidad guionizada por Bendis; así, esta historia es tanto su última historia en Los Vengadores como su primera historia de los Guardianes). Lo excesivo del egoísta intervencionismo estadounidense ha acabado soliviantando a la comunidad internacional del mismo modo que lo particular del vengador intervencionismo superheroico ha acabado molestando a los imperios galácticos marvelitas.
Todo este rollo macabeo ha sido dibujado por Hitch, Pacheco y B. Peterson, el final-epílogo por una ensalada de dibujantes que no vamos a mencionar. El primero es un buen dibujante ya de vuelta que sabe ordenar eficientemente la caótica narrativa de Bendis y con un notable estilo realista algo oscuro que encaja bien con el principio de la historia, la parte de la derrota. Por ello, su tramo es la mejor del cómic ya que, además, el principio es lo que mejor se le da al calvo. Los dos últimos dibujan torpemente el nudo con una narrativa clásica poco imaginativa y con torpeza anatómica, y en concreto el español con un estilo sobrio y feo y el estadounidense con un estilo donde conviven muchos estilos (por ejemplo al Capi lo dibuja a lo Immonen y a Frost lo dibuja a lo HA!), con lo que no consiguen, aunque no son comidos por Bendis, hacer nada por el burdo y torpe guión. Si Hitch sabe, además de representar la historia, transmitir sensaciones, los dos segundos con su genérico y bastante impersonal estilo solo ofrecen vulgaridad y una fría eficiencia que dejan desnudo a Bendis sin hacerlo agradable.
En fin, La Era de Ultrón no es una historia tan mala como se dice. De hecho es el mejor evento de Bendis, bien es cierto que no era difícil mejorar los otros. Lo curioso es que lo ha hecho repitiéndolos, copiándolos o canibalizándolos. No sé por qué. Parece que se debe a que Bendis encuentra ciertas cosas en el Universo Marvel que plasman sus ideas sobre los superhéroes. Así pues, aquí tenemos una serie de elementos presentes ya en otros eventos suyos. En La Era de Últron tenemos a Lobezno siendo el principal impulsor de la decisión de matar al responsable (decidido por ellos y sin considerar atenuantes) del problema igual que en Dinastía de M (este mutante representa para él la fuerza maniquea e irreflexiva), la Tierra Salvaje como escenario importante de la historia como en Invasión Secreta (al ser un lugar al margen de la Tierra para él es el mejor escondite), a Furia como un tipo ultraduro y tan paranoico que tiene previstas todas las catástrofes que pueden ocurrirle a la Tierra Marvel (curioso que a pesar de ello jamás sea capaz de evitarlas, otra tontá de Bendis) por lo que no puede ser más que el líder de los superhéroes como en Invasión Secreta, a Le Fay aliada con Doom como en sus Vengadores Oscuros y de nuevo a Lobezno tirándose desde el helitransporte de SHIELD como al principio de Dinastía de M (para Bendis o el peso de la revelación siempre hace caer o así es como retrata el ingreso del mesías en la Tierra, esto ocurre justo antes de que este arregle las cosas, o será que no considerá digno a Lobezno y por eso no puede estar en el cielo?). La maldad de La Era de Ultrón reside en que como propaganda proPym y como generador de consecuencias es muy endeble, igual que la forma de derrotar a Ultrón. No está bien explicado y eso la hace insuficiente. Como siempre una historia de Bendis es débil porque nunca argumenta. Así, este evento no demuestra porque la Tierra Marvel sin Pym sería peor que con él y su explicación a que el Tiempo se pete ahora tras 5 décadas de viajes por él es la siguiente simplicidad: puede que esta vez haya sido la gota que ha colmado el vaso. Que las cosas sean porque sí nunca gusta por eso Bendis a la postre siempre es malo. Sin embargo, este evento tiene partículas de interés por su superficial reflexión sobre los superhéroes. Quizás por esto sea Bendis un autor pues siempre ha mostrado suspicacia frente a los superhéroes: su género favorito es el noir, sus superhéroes favoritos no tiene poderes (Furia, Ojo de Halcón) o son de barrio (DD, Cage, Spiderman), Powers es una extenso cómic antisuperhéroico, prefiere la palabra al puñetazo y el humor a la solemnidad... Puede que un estudio de su obra demuestre que es un escritor como Moore, preocupado por quien vigila a los vigilantes-poderosos. La lección que aprende Lobezno que Bendis quiere enseñar a los estadounidenses de gatillo fácil es que el límite es la moral y que no estamos solos. Esto es la culminación del tema que Bendis venía desarrollando últimamente a través de Wonder man, los superhéroes no sólo son hacedores del Bien, han provocado muchos males también, de tal modo que muchas de sus hazañas son simplemente soluciones temporales a problemas por ellos creados. La irreflexión típica superheroica engendra males y por ello hay que limitarla. Esta línea parece que ha terminado en tiempo muerto pues lo que está haciendo Hickman es todo lo contrario.
También La Era de Ultrón tiene interés porque evidencia el cambio de paradigma que se está dando en el Universo Marvel. Estamos pasando del héroe de acción que triunfó en los 80 (cuando Stallone y Schwarzenegger lo petaban) encumbrando a Lobezno y a Punisher y que en los 90 vivió su época dorada, pistolones y ultraviolencia, por el héroe científico; volvemos a los 60. Del antiguo héroe, el fuerte guerrero, al héroe moderno, el astuto aventurero. Del vengador al previsor (no es por eso que los Vengatas se han hecho tan grandes?), a Prometeo. Personaje mítico griego ambiguo (ni Olímpico ni titán pero tío de la humanidad) que iluminó al Hombre dándole el fuego, una nueva tecnología que revolucionó la vida de nuestra especie. Prometeo significa previsor y eso era el ideal de los filósofos griegos porque no veían otra forma de evitar los males, la venganza, por definición, siempre llega tarde (además de ser la solución del impotente). Pero dudo que los superhéroes dejen de ser imprevisores como Epimeteo, el hermano de Prometeo. Cuando EE.UU. vuelva a sentirse fuerte los héroes de acción volverán. No obstante esta vuelta al pasado es sólo superficial, si en los 60 el científico molaba porque iba a hacer del mundo un lugar mejor y seguro, hoy, despertados de ese sueño, mola porque la tecnología mola (o porque el mayor sector aficionado a los superhéroes es el geek). Quizás por eso los 90 vuelven en cierta medida (como Stallone y Schwarzenegger). Esa Ángela, personaje creado en los 90 para los 90 con un diseño horrible por noventero que debían haber cambiado en Marvel (cubres a la Valquiria y a Ms. Marvel para traer una versión del chain mail bikini?), parece que anuncia que Marvel, aunque privilegia ahora al astuto y previsor, no renuncia a la especulación, la imprudencia, el machismo y la violencia (no en vano son características del ser estadounidense tradicional). No en vano el héroe aquí es Lobezno. Pero no porque arregla las cosas; lo que hace es limpiar su propia mierda. Bendis le hace recibir un rayo/luz emitido por Stark en el costado al final del nº 8 EE.UU., y le "resucita" 5 días para purificarlo de su agresividad unilateral. Por tanto el héroe aquí es Lobezno pues es el que aprende la lección del cuento. De este modo, aunque esto lo concluirá el Tiempo, La Era de Ultrón parece otro evento en el que Marvel finge que se mueve para ocultar que se vuelve más inmovilista. Lo curioso es que Prometeo cambia las cosas, mejoras tecnológicas que pongan fin a la guerra y a la enfermedad, por lo que resulta un mesías, guiar a la humanidad hacia el futuro. Mas ser un elemento transformador, como hemos visto, no es superheroico. Así que parece que Marvel, aunque se queda quieta, avanza hacia una gran contradicción.
Lo que hace relativamente interesante a La Era de Ultrón son los temas del intervencionismo y de las consecuencias. El primero es consustancial a los superhéroes. Cuál es el límite de su intervencionismo? Casi desde el principio ha sido la moral, por eso son conservadores. Los superhéroes mantienen el status quo porque esperan que la sociedad se arregle a sí misma pues consideran al Sistema como válido pues sus fallos se deben a los excesos de los vicios humanos, que es lo que combaten (la codicia desmedida, el impulso asesino, el ansia de dominación...). En esta historia Lobezno va contra todo eso ya que plantea un viaje temporal para deshacer un presente que no les gusta (presentado tramposamente pues está dominado por un exterminador de modo que así queda justificada la crueldad y la injusticia de tal acto, ejecutado justo cuando parece que no hay esperanza, pues Ultrón no es culpa de Pym del mismo modo que el hijo no es culpa del padre, con esa forma dentender las cosas empezó la Edad Contemporánea, pues ambos son entes libres e independientes, los pecados-delitos de uno no pueden ser responsabilidad del otro). Con ello viola las leyes superheroicas (y por ese acto de hybris es castigado con la muerte, ecos de tragedia griega tiene esta historia, quién lo iba decir de Bendis), las cosas se hacen como dice Furia o como planea Stark porque, como muy bien explican los más listos del Universo Marvel, hay tantas cosas en el pasado que cambiar que sería una tarea sin fin. La razón por la que no hacemos lo que nos venga en gana cada vez que las cosas no van como queremos es que no podemos. El fondo de la cuestión es que lo adulto es aguantarse con la sucesión temporal. La transgresión de Lobezno se explica porque los superhéroes se sienten abatidos, pesimistas e inútiles, es decir, no piensan con claridad y racionalidad, todo razonable salvo porque Bendis olvida que por definición el héroe es tenaz y optimista por lo que, aunque derrotado, no se deprime. Así pues, esta historia está construida por el choque entre tradición (puritanismo) y modernidad que afecta últimamente a la sociedad estadounidense. Por qué los Vengadores tienen ese nombre tan terrible que responde a la idea antigua de Justicia? Pues por el ojo por ojo, recuerden que el puritanismo es veterotestamentario. No se puede cambiar el pasado pero sí se puede castigar, cosa que siempre es a posteriori. Por eso los superhéroes no intervienen o cambian, eso es proactivo, sino revierten o restituyen, que es reactivo. Como héroes morales puritanos conciben el mundo como bueno por ser obra de Dios, tanto es así que incluso los nativos de la línea temporal sin Pym se consideran a sí mismos como una aberración, así que cambiarlo es algo tan malvado como lo prohibido por aquel de modo que sólo se puede castigar la transgresión. El cambio no es una opción. Contra esto va Lobezno, que es la agresión irreflexiva típica estadounidense que vivió con Bush jr. su momento más álgido, pero el mundo no es simple. En un mundo maniqueo se puede pasar directamente a la acción (como muy bien señala Morrison esta palabra fue el título de la primera cole de superhéroes) porque las cosas siempre están claras de modo que no hace falta pensar, pero el género superheroico ya no es así. Por eso en La Era de Ultrón fracasa la fuerza y triunfa la astucia. La victoria es de la metis de Stark. En un mundo complejo la fuerza de Aquiles no sirve, lo que sirve es la inteligencia de Odiseo. El poder militar estadounidense/la acción destructiva hoy es inútil, sólo hay que ver lo poco que pintan en esta historia Thor y el Capi, los otros miembros junto con el latas del tridente ofensivo de Marvel para su reciente y ya muerta Edad Heroica. La astucia puede resolver, incluso prevenir, que es lo que tiene poder volver al pasado. La astucia es Prometeo, esto lo desarrollaré un poco más adelante.
Esto enlaza con lo segundo, las consecuencias de La Era de Ultrón. Estas, en contra de la costumbre, han afectado al Universo Marvel entero. Esta vez no ha sido como antes, cuando el mainstream era infantil, que la venganza de los superhéroes era limpia. Es decir, no tenía consecuencias/daño colaterales sobre el cosmos inalterable y correcto por sagrado (Busiek escribió un gran historia sobre esto para su Astro City). Como digo esta vez dejar las cosas como estaban antes de la transgresión ha afectado al Universo Marvel además de a los superhéroes, en la tradición los héroes cargan con el peso de conocimiento (que es la penitencia de Lobezno por su transgresión, el vivir con su autoasesinato en la conciencia), como los soldados. Por qué? Pues porque EE.UU. ha madurado lo suficiente como para darse cuenta de su entorno, otros opinan que su decadencia les ha hecho perder su sentimiento de impunidad. Es lo mismo. El abuso en el siglo XXI de la intervención ha hecho ver a los estadounidenses que los grandes, por tamaño, actuaciones en un mundo globalizado son como un boomerang. No se trata sólo de nosotros... No estamos solos en el Universo es la conclusión del aleccionamiento entre estertores de un Strak alternativo a un Lobezno maniqueamente interventor. Esta lección de la víctima a su ofensor, una escena muy bien plasmada por Peterson, es quizás el mejor momento de toda La Era de Ultrón. Esta toma de conciencia es la razón por la que el Universo Marvel se ha visto perjudicado. Esto nos lleva a lo dicho sobre Iron Man. La Era de Ulrón es la razón de la misteriosa hostilidad de los imperios galácticos a la Tierra que se nos está narrando principalmente en Iron Man y en los Guardianes de la Galaxia (no por casualidad guionizada por Bendis; así, esta historia es tanto su última historia en Los Vengadores como su primera historia de los Guardianes). Lo excesivo del egoísta intervencionismo estadounidense ha acabado soliviantando a la comunidad internacional del mismo modo que lo particular del vengador intervencionismo superheroico ha acabado molestando a los imperios galácticos marvelitas.
Todo este rollo macabeo ha sido dibujado por Hitch, Pacheco y B. Peterson, el final-epílogo por una ensalada de dibujantes que no vamos a mencionar. El primero es un buen dibujante ya de vuelta que sabe ordenar eficientemente la caótica narrativa de Bendis y con un notable estilo realista algo oscuro que encaja bien con el principio de la historia, la parte de la derrota. Por ello, su tramo es la mejor del cómic ya que, además, el principio es lo que mejor se le da al calvo. Los dos últimos dibujan torpemente el nudo con una narrativa clásica poco imaginativa y con torpeza anatómica, y en concreto el español con un estilo sobrio y feo y el estadounidense con un estilo donde conviven muchos estilos (por ejemplo al Capi lo dibuja a lo Immonen y a Frost lo dibuja a lo HA!), con lo que no consiguen, aunque no son comidos por Bendis, hacer nada por el burdo y torpe guión. Si Hitch sabe, además de representar la historia, transmitir sensaciones, los dos segundos con su genérico y bastante impersonal estilo solo ofrecen vulgaridad y una fría eficiencia que dejan desnudo a Bendis sin hacerlo agradable.
En fin, La Era de Ultrón no es una historia tan mala como se dice. De hecho es el mejor evento de Bendis, bien es cierto que no era difícil mejorar los otros. Lo curioso es que lo ha hecho repitiéndolos, copiándolos o canibalizándolos. No sé por qué. Parece que se debe a que Bendis encuentra ciertas cosas en el Universo Marvel que plasman sus ideas sobre los superhéroes. Así pues, aquí tenemos una serie de elementos presentes ya en otros eventos suyos. En La Era de Últron tenemos a Lobezno siendo el principal impulsor de la decisión de matar al responsable (decidido por ellos y sin considerar atenuantes) del problema igual que en Dinastía de M (este mutante representa para él la fuerza maniquea e irreflexiva), la Tierra Salvaje como escenario importante de la historia como en Invasión Secreta (al ser un lugar al margen de la Tierra para él es el mejor escondite), a Furia como un tipo ultraduro y tan paranoico que tiene previstas todas las catástrofes que pueden ocurrirle a la Tierra Marvel (curioso que a pesar de ello jamás sea capaz de evitarlas, otra tontá de Bendis) por lo que no puede ser más que el líder de los superhéroes como en Invasión Secreta, a Le Fay aliada con Doom como en sus Vengadores Oscuros y de nuevo a Lobezno tirándose desde el helitransporte de SHIELD como al principio de Dinastía de M (para Bendis o el peso de la revelación siempre hace caer o así es como retrata el ingreso del mesías en la Tierra, esto ocurre justo antes de que este arregle las cosas, o será que no considerá digno a Lobezno y por eso no puede estar en el cielo?). La maldad de La Era de Ultrón reside en que como propaganda proPym y como generador de consecuencias es muy endeble, igual que la forma de derrotar a Ultrón. No está bien explicado y eso la hace insuficiente. Como siempre una historia de Bendis es débil porque nunca argumenta. Así, este evento no demuestra porque la Tierra Marvel sin Pym sería peor que con él y su explicación a que el Tiempo se pete ahora tras 5 décadas de viajes por él es la siguiente simplicidad: puede que esta vez haya sido la gota que ha colmado el vaso. Que las cosas sean porque sí nunca gusta por eso Bendis a la postre siempre es malo. Sin embargo, este evento tiene partículas de interés por su superficial reflexión sobre los superhéroes. Quizás por esto sea Bendis un autor pues siempre ha mostrado suspicacia frente a los superhéroes: su género favorito es el noir, sus superhéroes favoritos no tiene poderes (Furia, Ojo de Halcón) o son de barrio (DD, Cage, Spiderman), Powers es una extenso cómic antisuperhéroico, prefiere la palabra al puñetazo y el humor a la solemnidad... Puede que un estudio de su obra demuestre que es un escritor como Moore, preocupado por quien vigila a los vigilantes-poderosos. La lección que aprende Lobezno que Bendis quiere enseñar a los estadounidenses de gatillo fácil es que el límite es la moral y que no estamos solos. Esto es la culminación del tema que Bendis venía desarrollando últimamente a través de Wonder man, los superhéroes no sólo son hacedores del Bien, han provocado muchos males también, de tal modo que muchas de sus hazañas son simplemente soluciones temporales a problemas por ellos creados. La irreflexión típica superheroica engendra males y por ello hay que limitarla. Esta línea parece que ha terminado en tiempo muerto pues lo que está haciendo Hickman es todo lo contrario.
También La Era de Ultrón tiene interés porque evidencia el cambio de paradigma que se está dando en el Universo Marvel. Estamos pasando del héroe de acción que triunfó en los 80 (cuando Stallone y Schwarzenegger lo petaban) encumbrando a Lobezno y a Punisher y que en los 90 vivió su época dorada, pistolones y ultraviolencia, por el héroe científico; volvemos a los 60. Del antiguo héroe, el fuerte guerrero, al héroe moderno, el astuto aventurero. Del vengador al previsor (no es por eso que los Vengatas se han hecho tan grandes?), a Prometeo. Personaje mítico griego ambiguo (ni Olímpico ni titán pero tío de la humanidad) que iluminó al Hombre dándole el fuego, una nueva tecnología que revolucionó la vida de nuestra especie. Prometeo significa previsor y eso era el ideal de los filósofos griegos porque no veían otra forma de evitar los males, la venganza, por definición, siempre llega tarde (además de ser la solución del impotente). Pero dudo que los superhéroes dejen de ser imprevisores como Epimeteo, el hermano de Prometeo. Cuando EE.UU. vuelva a sentirse fuerte los héroes de acción volverán. No obstante esta vuelta al pasado es sólo superficial, si en los 60 el científico molaba porque iba a hacer del mundo un lugar mejor y seguro, hoy, despertados de ese sueño, mola porque la tecnología mola (o porque el mayor sector aficionado a los superhéroes es el geek). Quizás por eso los 90 vuelven en cierta medida (como Stallone y Schwarzenegger). Esa Ángela, personaje creado en los 90 para los 90 con un diseño horrible por noventero que debían haber cambiado en Marvel (cubres a la Valquiria y a Ms. Marvel para traer una versión del chain mail bikini?), parece que anuncia que Marvel, aunque privilegia ahora al astuto y previsor, no renuncia a la especulación, la imprudencia, el machismo y la violencia (no en vano son características del ser estadounidense tradicional). No en vano el héroe aquí es Lobezno. Pero no porque arregla las cosas; lo que hace es limpiar su propia mierda. Bendis le hace recibir un rayo/luz emitido por Stark en el costado al final del nº 8 EE.UU., y le "resucita" 5 días para purificarlo de su agresividad unilateral. Por tanto el héroe aquí es Lobezno pues es el que aprende la lección del cuento. De este modo, aunque esto lo concluirá el Tiempo, La Era de Ultrón parece otro evento en el que Marvel finge que se mueve para ocultar que se vuelve más inmovilista. Lo curioso es que Prometeo cambia las cosas, mejoras tecnológicas que pongan fin a la guerra y a la enfermedad, por lo que resulta un mesías, guiar a la humanidad hacia el futuro. Mas ser un elemento transformador, como hemos visto, no es superheroico. Así que parece que Marvel, aunque se queda quieta, avanza hacia una gran contradicción.
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