Después de leerme todo el volumen I EE.UU. de Los Vengadores, me he puesto a releerme todo lo que tengo dese supergrupo. Esa es la razón 1ª de que se pase por aquí esa breve etapa. La razón última es que me parece que vaticinó lo que tenemos hoy, sobre todo en lo audiovisual.
Esta etapa en su momento me dejó satisfecho pero ahora la encuentro mediocre y que sólo destaca por su dibujo. De todos modos me parece importante porque aunque Johns continúa fluidamente a Busiek y es un rato clásico (dedica un episodio a contarnos como follan el Pym y su ex de tal modo que el tipo escribió el canto del cisne de la 2ª pareja más antigua de Marvel), y por eso todavía el vol. I aún no ha terminado de verdad, su etapa se parece mucho más a lo que se hace ahora que al estilo clásico de su predecesor, que a lo que se hacía en los 90 y que a lo que se hacía a principios del siglo XXI (intentar reinventar la rueda). Otro aspecto moderno que tiene esta etapa de Los Vengadores es que es la 1ª questaba perfilada antes de empezar su publicación, si bien al final el plan no llegó a su fin, no sé el porqué.
Antes de hablar un poco de sus historias triangulémosla un poco para poder entender porque es así y no dotro modo. Johns es un guionista mediocre y convencional (si esto fuese falso entonces la enemistad entre Hombre Hormiga y Sota de Corazones no estaría metida con calzador) que ha triunfado porque sabe muy bien como contar una historia típica. Johns es un estadounidense conservador al estilo de Busiek. Es decir, no es republicano en el sentido de neoliberal, sino alguien tradicional en términos yankis. Finalmente esta etapa viene después del 11-S, así, es patriótica (en 1/3 de sus portadas el motivo principal es el Capi; estamos hablando de 19, no estoy loco porque de las 8 siguientes, las restantes para que el vol. III sacabe, 5 dellas muestran el mismo patrón si bien 1 dellas se recicló pues originalmente se hizo para alguno de los últimos nº de la etapa de Johns), es crítica con el gobierno que la cagó y eleva un poco al hombre corriente y degrada un poco al superhéroe.
Banderas trae esta etapa.
La 1ª de sus historias es clásica y tal vez por ello la mejor. Es una pena que haya quedao inconclusa. En ella encontramos junto al típico entuerto superheroico algo tan poco marvelita como que los Vengadores pasen a gobernar la Tierra una vez que la mayoría de los estados se han quedado sin sus gobernantes. No puede haber más contraste con lo que perpetró Bendis poco después, pero no desentona con los momentos pretéritos donde el supergupo coqueteó con el poder político. Es interesante comparar como Hama hizo que los Vengadores se independizasen de EE.UU. y se hiciesen un supergrupo de la NU con esto de Johns, donde unos Vengadores bien estadounidenses dirigen un mundo aterrorizado por un misterioso ataque a sus capitales (10-2002 aunque por obra y gracia de Viturtia aquí no lo leímos hasta casi 1 año después!). Así, el Capi es el jefe del mundo, y es tan bueno en el puesto que es capaz de disciplinar hasta al mismísimo Namor!
A esto le suceden 4 nº que Johns trata singularmente. Los 2 1º son tranquilos, en el 2º ni siquiera hay villano, y avanzan cosas, el 1º la gran historia de su etapa y el 2º la última grapa de la misma, el 3º culmina un maravilloso crossover dibujado notablemente por A. Davis donde se avanza lo que hoy se conoce como la trinidad Marvel (Capi, Latas y el que antes se llamaba Thor) y el 4º pone a Halcón como una especie de Tío Tom, demuestra que la tolerancia religiosa estadounidense no incluye el ateísmo y nos dice que mola pegar criminales, lógicamente no colocando para ejemplificarlo a uno rico y poderoso sino a un patético chalado. Lo importante destos nº es que Johns rápidamente hace que 1/3 de los Vengadores sean mujeres, 1/3 negros (si consideramos igual que Englehart que Visión es equivalente a un afroamericano:) y 1/4 extranjeros (es cierto que los Vengadores nunca han sido xenófobos pero también que de los questamos hablando uno es negro y el otro mujer). Con Johns se acaba la época en que ese supergrupo era mayoritariamente blanco y masculino. Hay algún Vengata homo?
La 2º historia larga de la etapa es la principal y la más larga (6 episodios cuando la norma son o 4 o 1). Como la dibuja Coipel es una de las más atractivas visualmente de todas las coles y volúmenes del supergupo. El tío dibuja fabulosamente pero sobre todo narra brillantemente, se nota que viene de la animación. Esta historia me parece que es la que mejor refleja lo que tenemos hoy. La historia es bastante cutre y el supervillano carece de poderes. Es un poco como presupongo que son las series televisivas actuales de superhéroes. Como hay poco presupuesto y como el público mayoritario no aprecia lo fantástico pues entonces todo es prosaico, exteriores, el supervillano es alguien normal, sólo es 1 y todo termina con una pelea a puñetazos bastante realista. Va de EE.UU. pues todo gira en torno a ese monumento imperialista que es el monte Rushmore y Washington y enfrenta lo que podemos llamar las 2 almas yankis: la protofascista y belicista y la tolerante y la igualitaria (el mal está en el interior de la montaña que representa a los 4 mejores presidentes estadounidenses anteriores a 1920; imagínense el criterio que en 1926 se usó para elegirlos!), estableciendo que es la cantidad de miedo y de dinero lo que hace que una pese más que la otra en un estadounidense, y alertando que el gobierno de EE.UU. es el más expuesto a caer en el lado oscuro yanki pues tiene la capacidad de atemorizar y miles de millones para gastar. Una historia parecida hizo Remender hace poco y le quedó mejor. En otro orden de cosas es otro relato superheroico que escenifica la moraleja del género: el mayor peligro para la Tierra son algunos estadounidenses (aunque aquí el malo sea un yayo nazi y el que lo vence un subsahariano; Johns es un profesional así que sabe que debe ser discreto): unos porque tienen una pulsión al linchamiento del diferente que no pueden dominar y otros porque son egoístas y ambiciosos.
La portada mola. La tecnología y los ideales de los que tanto presumen los yankis amenazadas por su belicismo y racismo-xenofobia.
Después del do pecho de la etapa sigue la penúltima grapa single de la etapa de Johns que es esa ya mencionada en la que la Van Dyne y su ex se van a las Vegas a follar. Es una grapa sorprendente porque la sexualidad, incluso hoy en día, es algo muy raro de ver en los Superhéroes y porque jamás se había representado así a la pareja protagonista. Lo curioso de la misma es ver como la gente era incapaz de aceptar la ruptura desa pareja (ahora lo que pasa es que a nadie le importa). De acuerdo quese asunto se hizo de forma muy torpe, pero qué más da. En realidad ambos no pegan ni con cola y al ser unos clichés de una época ya periclitada lo mejor que les podía pasar era liberarse de una relación inverosímil. Pero bueno, lo importante es questa es seguramente la grapa más adulta de Marvel y un ejemplo de quel empoderamiento femenino se entiende más como que la mujer sea capaz de comportase como un hombre que el que las mujeres puedan hacer lo mismo que los hombres. Lástima que el dibujante desta historia sea torpe e incapaz de representar la elegancia, y que Johns insista en su caracterización gruesa del supervillano. Como siempre un perturbado bruto. Más alimaña que humano.
A esto le sigue otra historia de a 4 que también anunció la actualidad. Lo que define a la Hulka clásica es que en un universo donde los superhéroes están acomplejados ella no lo está. Los héroes Marvel se ocultan en dobles identidades y sus poderes les torturan; la prima de Banner no es así. Eso la hace especial y divertida. Su optimismo, entusiasmo y desvergüenza es lo que la hizo ser la superheroína más popular de los 90 (vale, también un cuerpo escultural). Pues bien aquí Johns para jugar pervierte eso. La historia es Hulka convirtiéndose en el Hulk clásico. Una mujer que ha conseguido ser singular pese a ser derivativa volviendo a ser tal. Se acepta esa involución por lo que tiene de juego y de excepcionalidad, pero resulta que eso ha sido la última apuesta de Marvel para el personaje (aún en las tiendas españolas). La Hulka actual es un Hulk y así los aficionados se nos ha privado de "nuestro" personaje para dárselo a potenciales lectores. No hubiera sido mejor sumar a todos? Una mujer desinhibida, capaz y divertida es algo que no gusta a millenials y mujeres? A los suaves sólo les va el melodrama? Por lo demás esta historia sigue los parámetros que la del conflicto en el alma yanki: prosaico, exteriores y todo termina con una pelea a puñetazos bastante realista. Aquí el antagonista sí tiene poderes pero, como no hay presupuesto, es uno de los superhéroes. Con esto Johns avanzó lo peor para mi de los últimos 15 años: los superhéroes sólo se pegan entrellos (bueno en el crossover antes mentado pasaba lo mismo, el antagonista era un Thor Padre de Todos). Aunque Kolins es un buen narrador hubiera preferido otro dibujante porque su estilo me parece tosco, limitado e inadecuado para el coloreado digital convencional.
A esto le sigue otra historia de a 4 que también anunció la actualidad. Lo que define a la Hulka clásica es que en un universo donde los superhéroes están acomplejados ella no lo está. Los héroes Marvel se ocultan en dobles identidades y sus poderes les torturan; la prima de Banner no es así. Eso la hace especial y divertida. Su optimismo, entusiasmo y desvergüenza es lo que la hizo ser la superheroína más popular de los 90 (vale, también un cuerpo escultural). Pues bien aquí Johns para jugar pervierte eso. La historia es Hulka convirtiéndose en el Hulk clásico. Una mujer que ha conseguido ser singular pese a ser derivativa volviendo a ser tal. Se acepta esa involución por lo que tiene de juego y de excepcionalidad, pero resulta que eso ha sido la última apuesta de Marvel para el personaje (aún en las tiendas españolas). La Hulka actual es un Hulk y así los aficionados se nos ha privado de "nuestro" personaje para dárselo a potenciales lectores. No hubiera sido mejor sumar a todos? Una mujer desinhibida, capaz y divertida es algo que no gusta a millenials y mujeres? A los suaves sólo les va el melodrama? Por lo demás esta historia sigue los parámetros que la del conflicto en el alma yanki: prosaico, exteriores y todo termina con una pelea a puñetazos bastante realista. Aquí el antagonista sí tiene poderes pero, como no hay presupuesto, es uno de los superhéroes. Con esto Johns avanzó lo peor para mi de los últimos 15 años: los superhéroes sólo se pegan entrellos (bueno en el crossover antes mentado pasaba lo mismo, el antagonista era un Thor Padre de Todos). Aunque Kolins es un buen narrador hubiera preferido otro dibujante porque su estilo me parece tosco, limitado e inadecuado para el coloreado digital convencional.
El villano es un delincuente común que ha asesinado a su hija: -Necesito un doctor! -Para que te cure? Para que puedas acosar a otras niñas? No son esta frases parecidas a las del discurso de los que odian que los criminales tengan dchos? No es demagogia defender "mano dura" poniendo como ejemplo a un delincuente odioso?
La etapa de Johns termina con una grapa en la que el jodío se carga a uno de mis personajes favoritos de Marvel (sí, a mi me gusta el que no gusta a nadie y menos mal que en el Universo Marvel no muere nadie). Esta es más de lo mismo: prosaico, exteriores, el supervillano es alguien normal, sólo es 1 y todo termina con una pelea a puñetazos bastante realista. Esto último aquí no es verdad pero es que Johns sabe que siempre hay que cambiar algo de la plantilla para que el lector conservador (el que busca lo de siempre) lo trague sin problemas. No hay pelea porque un tío normal no puede hacer nada contra un tío con superpoderes. Esta grapa me parece mala 1º porque el villano es el bruto perturbado de siempre en Johns (hay muchos tipos de malvados Johns) y 2º por el conservadurismo de su guionista ya que defiende la pena de muerte (con poca convicción porque el ejecutor muere al final). Así, esta grapa es otra muestra del tópico de escritor imponiéndose a la serie para la que trabaja. Un Vengador no mata. Lo dijo S. Lee y lo han repetido todos los guionistas después de él, incluso Harras que hizo que un Vengador matase al creer que su víctima era una máquina en vez de un ser viviente.
Él... hirió a su propia hija. No sé el porqué o el cómo pero lo hizo. No es importante en el estado de dcho. responder a ambas preguntas, sobre todo a la 1ª? El castigo no debería venir siempre tras el conocimiento de las razones del crimen?
Así termina la etapa y sin duda ser tan breve la favorece. Su valor hoy es puramente documental y della sólo merece recordarse las grapas dibujadas por Coipel porque Johns nunca quiso salir de la mediocridad, se regodeó en los más deleznables clichés conservadores, renunció a la parte espectacular y pintoresca de los Superhéroes y sus historias largas resultan un poco alargadas.
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