Disculpad que os haya tenido tanto tiempo aguantando la respiración. Entiendo que siendo posiblemente el bloguero español que más palabras le ha dedicado a Alita/Gunnm, TODOS estáis esperando a que me pronuncie sobre su continuación, que por fin ha llegado aquí, hace como 4 meses que salió el 1º nº. Pues bien, podéis volver a respirar. No me ha gustado.
Si has pasado a leer este párrafo desde el anterior entiendo que es que quieres saber mis razones. No te preocupes que te las digo. He tardado porque me parecía mal opinar sin haber leído algunoS tomitos ya que es una serie larga. También porque es verano y tal. Y no me ha gustado porque ya no tiene nada de lo que hizo que este manga me encantase allá por los 90.
Alita/Gunnm comenzó como un cyberpunk posapicalíptico. Esto quiere decir que no hay capitalismo salvaje ni megacorporaciones y que las otras características, el mundo es una mierda, y encima es violento, la carne es demasiado débil y frágil, no hay sociedad, hay muy pocos humanos en el sentido espiritual del término, están radicalizadas. Eso hacía que la historia de maduración de Alita/Gunnm fuese épica. Y que su heroísmo redentor final fuese especial. Eso terminó cuando Kishiro retomó su obra. Si bien lo hizo de forma gradual. Ahora el cyberpunk de Alita/Gunnm, es light y lo que es peor, soft. Por otro lado la serie se ha convencionalizado y emblaquecido y deslizado hacia la Fantasía. Ahora la miseria y lo terrible carece de toda entidad porque es puro tópico, estereotipo y cliché. Por eso la historia carece de toda emoción e interés.
Es una pena ver como algo que te ha fascinado durante años ya no lo encuentras atractivo. Años deseando conocer el pasado de Alita/Gunnm y cuando te lo empiezan a contar ya no te interesa por la forma que tienen de contártelo. Con el tiempo Alita/Gunnm se ha convertido en un trabajo, en lo que Kishiro hace para vivir, y por eso esta serie, apoyada en una numerosa comunidad de fans incondicionales, está supeditada al mercado y tiene vistas a que dure todo lo posible. Por otro lado el mangaka ya no es el joven insatisfecho y ambicioso del principio. Tras superar una grave crisis y consolidarse, Kishiro ha perdido toda garra de modo que su obra se ha reducido a ser puro entretenimiento. Le ha pasado lo que a otros insignes autores alternativos, se ha comercializado. Totalmente comprensible, hace años que el Cómic no vive tiempos favorables para los raros y esto debe ser peor en Japón porque es un estado muy conservador y muy de mente única. Todo lo que sea por encajar y ser útil al grupo. En esa perspectiva comprendo con pena que Kishiro o Nihei se hayan deslizado desde un manga más o menos maduro, complejo y diferente al típico manga comercial para adolescentes nipones. Sensiblero, convencional y correcto. Una evolución pareja al arte de Kishiro cada vez menos currado y más convencional y ordinario. Así pues no es para mi.
No es un mal manga. Kishiro tiene talento y eso quiere decir que en lo que he leído desta secuela-precuela hay ideas y dibujos chulos. Por ejemplo es interesante su tono femenino porque aporta una visión novedosa al relato, lo malo es que es demasiado de cuento para niñas. El tema es que el tono del manga, su comercialidad (que está, más que en ser vulgar, en el tufo a voy estirar la cosa todo lo que se pueda) y su falta de espectacularidad (para el que tenga en mente los inicios desta serie) han hecho que no me encandile. Las cosas que apreciaba de Alita/Gunnm, su dureza, su progreso y su espectacularidad, ya no están. Kishiro ya no hace una obra violenta y heroica sino un manga melodramático para adolescentes :(
Es una pena ver como algo que te ha fascinado durante años ya no lo encuentras atractivo. Años deseando conocer el pasado de Alita/Gunnm y cuando te lo empiezan a contar ya no te interesa por la forma que tienen de contártelo. Con el tiempo Alita/Gunnm se ha convertido en un trabajo, en lo que Kishiro hace para vivir, y por eso esta serie, apoyada en una numerosa comunidad de fans incondicionales, está supeditada al mercado y tiene vistas a que dure todo lo posible. Por otro lado el mangaka ya no es el joven insatisfecho y ambicioso del principio. Tras superar una grave crisis y consolidarse, Kishiro ha perdido toda garra de modo que su obra se ha reducido a ser puro entretenimiento. Le ha pasado lo que a otros insignes autores alternativos, se ha comercializado. Totalmente comprensible, hace años que el Cómic no vive tiempos favorables para los raros y esto debe ser peor en Japón porque es un estado muy conservador y muy de mente única. Todo lo que sea por encajar y ser útil al grupo. En esa perspectiva comprendo con pena que Kishiro o Nihei se hayan deslizado desde un manga más o menos maduro, complejo y diferente al típico manga comercial para adolescentes nipones. Sensiblero, convencional y correcto. Una evolución pareja al arte de Kishiro cada vez menos currado y más convencional y ordinario. Así pues no es para mi.
No es un mal manga. Kishiro tiene talento y eso quiere decir que en lo que he leído desta secuela-precuela hay ideas y dibujos chulos. Por ejemplo es interesante su tono femenino porque aporta una visión novedosa al relato, lo malo es que es demasiado de cuento para niñas. El tema es que el tono del manga, su comercialidad (que está, más que en ser vulgar, en el tufo a voy estirar la cosa todo lo que se pueda) y su falta de espectacularidad (para el que tenga en mente los inicios desta serie) han hecho que no me encandile. Las cosas que apreciaba de Alita/Gunnm, su dureza, su progreso y su espectacularidad, ya no están. Kishiro ya no hace una obra violenta y heroica sino un manga melodramático para adolescentes :(
Comentarios
Ismamelón Sobrino.