Ya saben que Bendis me parece un muy mal guionista pero que eso no impide que le lea de vez en cuando. Esta vez fue por Thor, por la grapa y por A. Davis. El resultado no me ha decepcionado, es decir, Bendis hace un trabajo tan malo como siempre.
El caso es que Bendis no empieza nada mal. Un argumento simple y convencional tirado por unos personajes-cliché sazonado con el típico humor bendisiano, que aunque gracioso a veces lo único que hace es torpedear la atmósfera. Pero una cosa que distingue a Bendis es que no sabe cuando se está disparando en el pie. La épica y la tensión no son compatibles con el humor pues este las torna en comedia. Así, la historia se lee con mucho agrado en sus primeras 4 partes a pesar de que el simple argumento está muy estirado, pero en su 5ª y última parte nos damos de bruces con el suelo porque en ella es cuando nos damos cuenta de que Bendis está más allá de la redención. Pase, a estas alturas se asume, que esta miniserie no tenga encaje con lo narrado por Gillen. Parece que hay que leerlo tras el final del anterior volumen de "Thor". Justo antes de ponerse con la cole actual del dios del trueno nórdico versión Marvel. Cómo encaja la Hela que obtiene un señorío de Mefisto con esta? Cómo pueden ser la misma la Hela que pide ayuda a Thor para salvar a su señorío con la desta miniserie? Son detalles que no interesan a Bendis (seguro que ni se ha percatado de ellos) que se podían haber resuelto con algunas viñetas. Pero no tiene pase que la historia funcione utilizando las cosas sólo cuando conviene narrativamente. Thor pierde el martillo pero no se molesta en buscarlo aunque nadie puede hacerse con él y por tanto su paradero está muy claro, está donde lo perdió. Tiene que aparecer La Encantadora como deux ex machina (que nadie sabe como sobrevive a un enfrentamiento con una espada capaz de transformar los 9 Mundos) para que lo recupere. Por último hay incongruencias. Thor responde a la pregunta de por qué vuelve a ser por enésima vez el Héroe restaurador del status quo con: usar este poder sacrílego para mis propios deseos me convertiría en un demonio igual que ella. O sea, Thor deja Asgard en Midgard porque estaba así antes de empezar la miniserie olvidando que fue su propio capricho el que puso la ciudad divina en la Tierra. Lo que fue, además, la razón de "Asedio", así lo entendí yo, y es el motor de la 1ª saga del actual volumen de "Thor". Está claro que Bendis no ha vuelto a leer un cómic de Thor desde el final de la reputada etapa Simonson (la cual proyecta una gran y oscura sombra sobre esta miniserie), ni siquiera los suyos, y a casi nadie le importa. Así pues, GA es otra historia típica de Bendis, argumento simple, buenos diálogos, buen humor, incongruencias, narrativa forzada y desastroso final. Bendis sólo mola mientras presenta la historia. En cuanto esta empieza a desenlazarse, la mierda empieza a entrar por todos lados.
Tíos, parece que venís de un campamento de Dragones y Mazmorras.
Afortunadamente no todo es malo en esta miniserie pues tenemos en ella al mejor A. Davis, con su fiel escudero M. Farmer, de los últimos años. Yo creía que este dibujante ya estaba de vuelta pero aquí demuestra que no, de modo que hoy por hoy sigue siendo el mejor. Lo que no entiendo es la motivación que ha encontrado en esta miniserie porque a un sabio como él no se le ha podido pasar el patatero guión de Bendis. En estas páginas hace un trabajo como siempre sobrio, nunca se luce ni busca la espectacularidad, pero fabuloso dado su talento y experiencia. Lo que más me ha gustado ha sido como ha impuesto su narrativa a Bendis. En esta miniserie, salvo momentos puntuales como la secuencia del ojo, no tenemos la narrativa que aquel impone a los dibujantes sino la de A. Davis en estado puro. Así, tenemos una historia perfectamente narrada de forma clásica y la mejor revindicación que se podía hacer de La Encantadora. Y exitosa además a juzgar por lo que dice el palmero de J. M. Clemente: Fraction la va a usar. La Encantadora es un secundario importante de Thor olvidado por los guionistas de su serie regular en particular y por Marvel en general. Algo que la labor A. Davis ha demostrado que ha sido un error pues su pericia hace evidente su potencial. Un acierto del dibujante pues J. M. Clemente nos cuenta que su inclusión se debe a este y no a Bendis. Lo cual deja la sospecha de que (casi) todo lo bueno de esta miniserie se debe al gran A. Davis. Desde luego el aire de aventura, la inclusión de tías buenas y el dinamismo y el clasicismo de la historia (GA es seguramente lo más clásico que Bendis ha escrito para Marvel) huelen a A. Davis y no a Bendis.
La edición de Panini afortunadamente ha sido en grapa con lo que se demuestra la salud de este denostado formato, así como que es el mejor vehículo para publicar el mainstream más popular. Sólo le pongo 2 peros. El 1º que no ha puesto por ningún sitio que era una miniserie de 5 y el 2º el título. Si bien el original no tiene, algo así como Primeros/Principales Vengadores, mucho gancho, el de Guerras Asgardianas no es muy ajustado y apesta a nostalgia. Si con A. Viturtia teníamos que padecer la nostalgia de Vertice, con J. M. Clemente la 1a época de forum. Lo que hay que hacer es tratar las cosas como son y no intentar disfrazarlas con nuestra añorada juventud perdida.
Hey, no se lo cuentes a Thor porque parece que va a caerse, pero no me divertía tanto desde que fui al campamento Dragones y Mazmorras de verano. (Iron Man no fue un chaval en los 80, PUTO Bendis)
En conclusión, GA es una miniserie que tan solo se deja leer ya que al ir de más a menos deja en evidencia todos sus fallos. Además no tiene fácil encaje con "Thor" y tampoco presta mucha atención a la relación intervengatas, el motivo principal de la miniserie según la editorial. La resolución de las diferencias entre Iron Man y el Capi, que no olvidemos, llevaron este último a la muerte apenas es tratada por Bendis. 1º se equivoca al hacer que vayan por separado la 1ª mitad de la historia; y luego se piensa que con unos chistecitos (con hedor machista) y un poco de camadería chusquera los lectores vamos a creer que el problema está arreglado. No señor calvo, no. Muy pobre. Así, GA queda como una miniserie alegre a la vista y divertida si se lee sin pensar porque si no, no es más que una mediocridad sin más justificación que un A. Davis espléndido.
Comentarios
A Bendis, en cambio, le he visto con su rendimiento habitual. Es decir, coincido contigo en que su trabajo en esta mini ha sido una basurilla (otra más). Ni sabe guionizar súpers, ni pone empeño en ello. El argumento de la mini es previsible y facilón a más no poder, pero encima el amigo se dedica a sazonarlo con "genialidades" como la conversación sobre quién se había acostado con quién. En fin...
Se han hecho mil putadas desde Civil War a acá, pero con una aventurita de tres al cuarto se dan cuenta de lo mucho que les gusta hacer el ganso juntos, se perdonan y hasta se abrazan. Todo decidido en un ratillo. Ayer se intentaban matar, hoy pelillos a la mar.
Qué fraude la llamada "Edad Heroica": su principal guionista no tiene ni idea (ni interés, insisto) en hacer cómics de superhéroes, pero la editorial nos vende la moto prometiéndonos lo contrario.
Bueno, ha sido en grapa y eso me reconforta un poco.
Bien dicho. Aunque veo a Davis mejor que en sus últimos trabajos (Clandestine 3º parte y el nº especial de Thor), tempoco es el de los 1º noventa pero desde luego es mejor que la mayoría de los jóvenes actuales. En cuanto a Bendis, pues pensamos lo mismo. Se ve que estamos out ;P
En lo que no estoy de acuerdo es que Bendis no sabe escribir superhéroes, a estas alturas me parece ya más un estereotipo que una realidad, para mi Bendis NO SABÍA escribir supertipos, pero a fuerza de hacerlo creo que lo ha conseguido, a ver esta mini no es el mejor ejemplo, pero cosas como Ultimate Spiderman (en mi opinión, en los últimos tiempos, a la altura de Invencible), o incluso sus Nuevos Vengadores (donde ya maneja dinámica de grupo, interacción y demás) son claras pruebas de que si sabe hacer cómics de superhéroes, solo que no son los cómics de superhéroes con los que nosotros crecimos.