Ya le dediqué a este cómic unos párrafos en su momento, pero al releérmelo me ha parecido mejor de lo que recordaba. Así que me ha sorprendido gratamente. Por eso los he reescrito hasta el punto de hacer un post nuevo. Por eso este es una entrada nueva en ntro. blog. Mas ojo, este cómic es uno de Superhéroes competente, o sea, no es nada del otro mundo. Si no te molan estos, o si no tienes nidea de los Nuevos Dioses, no tienes motivo para acercarte a él habiendo todo lo que hay, pero me ha vuelto a demostrar que es necesario saber escribir Superhéroes para questos funcionen. En eso el susodicho es como cualquier otro género literario. Esa es la simplexplicación de la excelencia de La muerte de los Nuevos Dioses. Por ello es lamentable e inexplicable que hoy haya tanto incompetente escribiéndolos. Para mi es uno de los principales factores quexplican porque hoy venden de media un 25% de lo que vendían cuando yo empecé a leerlos. Aunque lo triste no es eso, lo triste es que esa competencia, el saber escribir Superhéroes, ya sólo lo tienen los viejos del lugar, lo demuestra este cómic, porque casi ninguno de los nuevos se ha molestado en aprender de y con ellos. En mi opinión porque en la 1ª década del XXI las editoriales mainstream para poder sobrevivir estiraron tanto el género que lo dieron de sí, y así hoy cualquiera viene a escribir sus historias en él como si cualquier argumento funcionase con justicieros disfrazados, Espionaje, Policíaco, Melodrama Burgués, Terror... Igual que los pistoleros tienen una ideosincrasia particular que hace que ciertas historias no puedan contarse con ellos, pasa lo mismo con los superhéroes. Estos no son personas normales como parece pensarse hoy, eso pueden serlo algunos villanos. Los superhéroes son PERSONAJES nobles y simbólicos (aunque muchos dellos todavía no hayan conseguido simbolizar algo) y sus historias son fábulas morales. Esto lo sabe muy bien Starlin y por eso le salió un cómic interesante que es un digno final al Cuarto Mundo de Kirby ya que, además, ni lo explota ni lo desvirtúa.
Este es un maxiserie dictada por las circunstancias. Como Crisis Final presuponía la muerte de los Nuevos Dioses, Didio decidió que DC no podía permitirse no contar eso. En eso anduvo acertado, y también en encargársela a Starlin ya que es un autor que, por sus preocupaciones metafísicas y tendencia trágica, es uno de los pocos adecuados para tratar personajes con una fuerza arquetípica tan grande como los Nuevos Dioses, a los cuales ya había tratado en el pasado. Starlin también, como dije, estuvo bastante acertado pues le ha quedado una obra correcta y sólida. Mas también fría por lo que desaprovecha un argumento con mucho potencial, pero, citando su obra anterior con los Nuevos Dioses, trata el material impecablemente, sabe mantener el suspense hasta el final y hace que el aura arquetípica a los Nuevos Dioses brille, algo muy difícil de hacer pues para ello hay que saber mitología. Por eso esta ambiciosa miniserie (8 números de 30 páginas) no sucumbe bajo su propio peso.
Es paradójico que para contar un götterdämnerung aquel autor haya optado por una estructura narrativa vulgar, convencional y burguesa como es el Quién lo hizo. No sé porque se le ocurrió tal cosa pero se lo podía permitir porque no es Agatha Christie. Así, la rutinaria y clásica investigación de una serie de asesinatos perpetrada por un psycho, aquí es algo original y épico puesto que las víctimas son Nuevos Dioses y los investigadores principales son Superman y Mr. Milagro. Este último muy diferente del habitual pues posee la Ecuación Antivida, es decir, es casi omnipotente, y ha perdido a Barda, razón por la cual me juego el cuello a que ha sido la inspiración para ese desastre que es el Mr. Milagro de King. Starlin años antes ya convirtió a este mítico personaje, el dios de la Libertad de DC, en un burgués ruin que es incapaz dafrontar el apocalipsis de su vida. La introducción de Superman es muy acertada no porque es el único superhéroe divino que hay, sino porque al ser el dios de los protectores hace resaltar más la dureza de los mundos míticos pues siempre son mundos en guerra cósmica, la desesperanza y la rabia de los Nuevos Dioses que saben que ha llegado su extinción, el espíritu guerrero de Orión, el deseo de venganza que se come la gentileza característica de Mr. Milagro y, cómo no, el megalómano despotismo de Darkseid. Estos contrastes aportan mucha tensión a la historia de tal modo que sustituyen con éxito la ausencia democión que es característica de Starlin porque es un tipo bastante cerebral. En sus historias la gente maquina o reflexiona más que otra cosa, y los personajes que mejor le salen son precisamente los racionales amorales como Metron o Darkseid. Ese autor es un tipo con temperamento y tristón y por ello sus personajes sufren y son iracundos, pero lo que predomina en su obra son tipos taimados y calculadores como Thanos o Warlock. Así pues la historia no es original pero no es el típico Quién lo hizo porque Starlin mete esos conceptos metafísicos de los 60 que ha desarrollado más en Marvel (la lectura desto ayuda a entender mejor su obra en esa editorial) y la fuerza arquetípica de lo mítico. Por eso esta maxiserie pese a su vulgaridad tiene sus sorpresas y sus momentos de brillantez y muestra que es lo que hace tan potente y alucinante a Superman y a los Nuevos Dioses.
No obstante Starlin falla en no responder a algunas de las preguntas fundamentales de su historia, o sea, no explica satisfactoriamente por qué las cosas ocurren así y no dotro modo (por qué el psycho no se carga 1º a Darkseid que es el más peligroso de todos, más quel último kriptoniano?), de tal forma que el final no es redondo y por ello esta carencia es otra razón por la questa obra no es totalmente satisfactoria. También contribuye a ello su dibujo. Starlin es un dibujante mediocre y por ello no puede ocuparse de 240 páginas. Uno sacaba cansando de un dibujo que quiere ser realista pero está lleno de fallos anatómicos y de perspectiva, y que quiere ser dinámico pero sólo le sale ser acartonado. A Starlin le salva, como a F. Miller, el ser un sobresaliente narrador. Lamentablemente con el tiempo se ha hecho bastante clásico pero aquí cuando quiere usa toda la potencia del Cómic para contar una historia. Es un gusto ver a un dibujante que no piensa que un cómic es un storyboard ya que ese tipo de ilustrador es lo que más abunda hoy en EEUU, sobre todo en el mainstream. Así, el Starlin narrador salva al Starlin dibujante. Gracias a que sabe contar bien una historia tanto con palabras como con viñetas su dibujo flojete y ya viejuno (puro 70s) no molesta nunca. Y eso que su estilo no es nada apropiado para un ragnarök. Igual de inapropiado es el color que los dibujos de Starlin han recibido pues es simple y funcional. Así, la torpeza dese autor y el convencional tratamiento de las tintas, la iluminación y el color privan a esta miniserie de un aspecto visual que plasme la carga trágica y ominosa de tan magna historia.
No obstante, como he dicho, los fallos destas grapas no las impiden ser destacables ya que su autor plasma la grandiosidad de las creaciones de Kirby, que es reverenciado tan solo gráficamente cuando debería serlo más por creador de conceptos. Esta miniserie de Starlin es un buen ejemplo de lo tremendo que son los conceptos del Cuarto Mundo que aquel creó. Considero que ahora, justo cuando el género esta renunciado a esa grandiosidad, pretenciosidad y cariz mitológico que Kirby le dio, es cuando mejor se puede observar que fue algo más que un dibujante revolucionario, genial y adelantado a su tiempo. La gente debería empezar a valorar más su faceta como cocreador de universos porque en eso aún es más rompedor y único. Un buen ejemplo de su excelencia en ese aspecto es que sus personajes precisan de guionistas sobresalientes para poder mostrar su potencia. Se necesita un bagaje cultural y una inquietud intelectual por encima de la que tiene un estadounidense típico, que son la mayoría de los guionistas de superhéroes dahora y de siempre. Si estuviese equivocado EEUU no necesitaría de británicos para poder elevar los Superhéroes por encima de su típica acción maniquea y convencional que les ha dado, con razón, tan mala fama entre la gente que no aprecia la rudeza del pop para chicos. Los conceptos de Kirby son complejos y tremendos y por ello no puede manejarlos cualquiera. Lo prueba cómics como este. Hay que ser mejor que muchos para lograr que los Nuevos Dioses sean Nuevos Dioses y no unos superpoderosos cualquiera. No es fácil dar a unos personajes una aura mítica, arquetípica, metafísica y, en cierto modo, inspiradora, sobre todo, cuando tienen un aspecto torpe y convencional. Starlin hace aquí eso porqueste tipo de historias son las que se le da bien.
Comentarios
Su dibujo, es una pena, porque en los primeros 10-12 números de Dreadstar, que es su mejor momento, alcanzó un nivel que resiste muy bien el paso del tiempo. Pero involucionó, y aunque a mi me parece personal e interesante, no vamos a negar que, actualmente, huele a naftalina.
Otra obra que empieza bastante bien y que se despeña al vacío en el tramo final (seguramente más que ésta) es "La guerra del infinito".
Nadie me dio respuesta, seguramente porque no la habían leído
Yo no sé si Los Nuevos Dioses están vivos actualmente en el UDC.
Por cierto, ahora la moda es arrearle a King
Yo tampoco sé Tom, pero si están muertos me imagino questán a punto de ser resucitados por la peli que les van hacer (que miedito da pese a que no hace falta videarla). A King le ha pasado lo que les pasa a todos los nuevos que despuntan algo. Yo ya lo tengo visto de la década pasada. Los interneteros están siempre esperando a que salga la nueva esperanza blanca así que cualquiera que despunte un poco le encumbran antes de tiempo, y por eso al final le linchan, no han esperado lo suficiente para valorarlo correctamente. El típico comportamiento irracional de la masa. Eso le ha pasado a King. La diferencia deste con los anteriores (Soule, Snyder, Duggan, ahora Cates) es que sí es un buen guionista (todavía es pronto para decir eso de Cates pues está empezando). El problema es que lo que quiere hacer este guionista es melodrama burgués y, claro, pues al final no ha resultado en un buen guionista se superhéroes. El tío sólo quiere contar melodramas: gente sufriendo por crisis matrimoniales o por el estrés del trabajo, y, claro, pues normal que sus superhéroes hayan acabado decepcionando. Su caída malegra porque yo ya lo dije cuando todo el mundo le chupaba la polla por su Visión cuando es una versión de American Beauty que vuelve a poner en el centro a la familia tradicional en un momento en que se ha decidido marginarla un poco para normalizar al resto (en esto se ve lo progres de boquilla que son muchos fanes de superhéroes, sobre todo españoles, siempre se rinden ante lo conservador y burgués). Eso en sí no es malo, pero no se puede hacer en Superhéroes. No se podía haber ido Visi a compartir piso con unos bohemios? No podía haberse montado una familia sin hijos o sin perro o no suburbial o gay? Los superhéroes son Fantasía, lo distinto, y eso no lo quiere King y el resultado es su marginación actual. De la cual malegro. Que aprenda y luego vuelva a revolucionar el género. Así que le tengan apartado.