Vuelto de las minivacaciones playeras y muy perezoso retomo el blog con un post peliculero ya que hacía tiempo que no escribía uno de estos. Veo más películas que antes pero eso no ha facilitado que encuentre más fácilmente aquellas que animan a ensalzarlas o a despellejarlas.
The Rocky Horror Picture Show es la versión fílmica del musical raruno muy setentero de M. O´Brien que, usando el esquema de las pelis de género de serie B de los 50, motiva a revindicarse a uno mismo sin importar la opinión social y a expandir nuestra mente. Salvo la gran actuación de T. Curry y el notable final es mediocre como película. Sin embargo, las canciones son muy buenas, es muy alternativo (a pesar de tener casi 40 años), original, divertido y audaz y tiene muchos detallitos que sólo se aprecian en los sucesivos videados.
Lo que la hace una buena película es que es no es un musical típico. Ni hay complejas coreografías, ni todo es muy femenino, ni los números musicales interrumpen la acción constantemente. No se trata de entretener llevando la ñoñería a un nuevo límite, sino de dar un mensaje de libertad y de amor propio parodiando unos estilemas trasnochados pero simpaticotes e ingenuos. El lema de la The Rocky Horror Picture Show es: no lo sueñes, se lo (don´t dream it, be it). Que es el de Atlas, el forzudo que inspiró a Morrison para hacer Flex Mentallo, un culturista que hizo una fortuna anunciándose en los cómics entre los 40 y los 80 ofreciendo un método a sus escuálidos lectores que los volvería en pocos días hombres hechos y derechos. Esta es la clave de la película, la metamorfosis, pasar de ser oruga a ser mariposa. Lo trans- (travesti transexual de Transilvania). Este tema es el formol que ha preservado a este musical. Aunque la belleza es un tema hoy mucho más deseado e importante que en los 70, Rocky Horror ya apunta lo demencial e insustancial que es perseguir sólo la belleza. Sin embargo su principal tema es que no hay que tener miedo a transformarse en lo que uno tiene dentro rechazando los límites del consenso social si es necesario. Así, aunque muy setentera, la década del inicio de la revindicación gay, del look andrógino y del glam, la película sigue portando un mensaje atemporal, ahora mucho más evidente que entonces pues ahora el árbol no nos impide ver el bosque, ya que lo normal sigue siendo un corsé incómodo para mucha gente independientemente de su orientación sexual.
Por ello The Rocky Horror Picture Show es uno de los pocos musicales que pueden ser disfrutados por todos aquellos que odiamos este género. Su historia paródica, su mensaje aún pertinente, sus grandes canciones y un desprejuiciamiento que poca gente casi 40 años después se atreve a exhibir son las características que han hecho de esta película una de las pocas verdaderamente de culto que existen. Por ello, no se debería rechazar la oportunidad de videarla.
Por ello The Rocky Horror Picture Show es uno de los pocos musicales que pueden ser disfrutados por todos aquellos que odiamos este género. Su historia paródica, su mensaje aún pertinente, sus grandes canciones y un desprejuiciamiento que poca gente casi 40 años después se atreve a exhibir son las características que han hecho de esta película una de las pocas verdaderamente de culto que existen. Por ello, no se debería rechazar la oportunidad de videarla.
Comentarios
Curioso que digas lo de Flex mentalo, en el post que hice hace poco sobre el tebeo puse la canción de la película que habla de ello
un saludo