Tras la miniserie con los Vengatas los Thunderbolts recibieron luz verde para volver como serie regular (que ya reseñé en tiempo real en su momento). Además de que la decisión de su cancelación se debió a caprichos y no a realidades, Marvel estaba repitiendo su historia: la serie nació en un momento en que el Universo Marvel se había quedado sin los Vengadores porque estos habían sido apresados en una realidad de bolsillo por tiempo indefinido, y volvió a pasar lo mismo: Bendis empujado por la editorial había saltado por los aires, de forma muy lamentable por su incoherencia e idiotez, como casi todo lo que hace el calvo, al supergrupo marvelita. Así que de nuevo había espacio para un supergrupo afín a ellos, si bien esta vez los Vengadores no habían desaparecido sino que se habían transformado en los Nuevos Vengadores. Así pues, el ciclo volvía a comenzar. Pero como el nuevo nunca debe ser igual al anterior (por eso incluso una formación familiar como es la de los 4F cambia...
Este es un blog de comics. Nace con la intención de criticar (juzgar de las cosas, fundándose en los principios de la ciencia o en las reglas del arte y/o censurar, notar, vituperar las acciones o conducta de alguien.) todo lo que se me ocurra. Pero principalmente comics, libros y películas.