"Los Seis Secretos" es la respuesta de DC al grim&gritty que ha estado desplegando Marvel últimamente. Sólo que esta, en vez de adoptar el punto de vista cínico y conspiparanoico del pop yanki posNixon como hace Bendis, se atiene al género de modo que resulta una serie regular superheroica donde se mezclan con armonía lo clásico y lo posmoderno.
Los Seis Secretos, para mi el mejor supergrupo que ha surgido en el siglo XXI junto con Runaways, son un grupo de villanos que afirmaron su individualidad en los eventos que preludiaron Crisis Infinita. Uno de los acontecimientos detonantes desta fue la alianza de todos los villanos bajo una sola autoridad, aunque esta era coral. Sólo seis villanos (algunos de ellos no son parte de la formación actual) se opusieron. No querían servir a nadie. Este acto de independencia les costó caro pues Crisis Infinita fue una situación con tintes apocalípticos, la gente se agrupó bajo el lema de: estás con nosotros o contra nosotros. Así, los Seis Secretos originales se quedaron en tierra de nadie y solos. Enemigos tanto de los superhéroes como de los supervillanos. Sobrevivieron con cambios y eso les llevó a una zona gris o indefinida. No podían seguir siendo supervillanos pero tampoco podían ser superhéroes. Una crisis existencial que llevó a algunos, los menos cínicos y posmodernos, a replantearse sus actos e intentar ir hacia la luz. Así de intensa fue para ellos Crisis Infinita. El resultado fue que mientras hacían de mercenarios profesionales (es decir amorales), el grupo empezó a estresarse, de ahí nuevos cambios, porque para ellos, amenazados por todos, es fundamental permanecer juntos (algo que por otro lado no saben cómo llevar ya que todos son exsupervillanos solitarios). Su seriempezó con este conflicto y con un nuevo enfrentamiento con todos los supervillanos del UDC por la propiedad de una tarjeta que permite librarse del Infierno. Una idea genial de Simone muy bien llevada porque la presenta como una lucha a muerte entre gente que no está segura de que haya Infierno pero sí lo está de que, si existe, va ahí de cabeza. Este conflicto, lógicamente, agudizó las tensiones del grupo entre los que quieren ir hacia la luz y entre los que piensan que ni hay luz ni oscuridad. Este tomo sigue con esas tensiones. Así, en él, los 6S se enfrentan entre sí a causa de que su nuevo trabajo mercenario consiste en proteger las obras de una cárcel internacional que pretende recrear en la Tierra el Infierno que Dante describió en "La Divina Comedia". De nuevo a este grupo el estar expuestos al Mal cristiano (no podría ser de otra forma en un cómic yanki) les supone el reverdecimiento de la tensión interna pues no pueden seguir siendo mercenarios amorales al no ser ya los mismos de antaño. Como veis, el mainstream aún no está preparado para relatar historias protagonizadas por villanos.
Todo el mérito de la calidad de esta serie es de G. Simone. Esta guionista destilo clásico, con cierta singularidad por su talento literario y cómico y por su visión crítica del género nacida de su feminidad, hace aquí un gran trabajo porque se mueve con soltura y habilidad en una cole fresca y novedosa al no estar rígidamente sometida al maniqueísmo del género ni tener detrás una dilatada continuidad. Se nota que estas características le gustan y que los personajes quescribe le atraen a pesar de que los retrata como joputas. También su trabajo es bueno porque concilia perfectamente el género con el grim&gritty que el fiasco Bush jr. a vuelto a poner de moda en EE.UU. Por eso sus personajes son tan joputas como los Thunderbolts de Ellis o los Vengatas de Osborn y sus comics son igual de macabros y violentos que los de aquellos pero los de "Los Seis Secretos" son mejores porque están mejor integrados en el género, son más originales e ingeniosos y en ellos existe tanto la dinámica de grupo como la caracterización. Además, Simone aprovecha para hacer en ellos una ligera reflexión sobre el Mal y el supervillano de modo que eleva a esta serie por encima del nivel de mero vehículo de entretenimiento de usar y tirar. Así pues, los 6S, aunque son seres de ficción, son creíbles y viven emocionantes y originales aventuras amorales, macabras y violentas que tienen una profundidad que los redimen de la comercialidad. Por eso es la mejor serie de superhéroes que se está publicando actualmente.
El dibujante regular es N. Scott que aquí, a diferencia del anterior tomo, es ayudado por C. Rodríguez. Un dibujante influenciado por Pacheco, mediocre por pericia y anodino porque, al practicar el estilo del género, no se distingue de todos los demás dibujantes mediocres del mainstream, aunque es competente en la expresividad y en la narración. N. Scott es una dibujante que concilia toscamente el academicismo con el estilo Image. Su mediocridad deprecia los guiones de Simone pero al menos plantea su trabajo de forma más seria y profesional que la mayoría de los dibujantes mainstream al siempre intentar hacer las cosas bien: hacer a los personajes expresivos, dar dinamismo a los dibujos, narrar con emoción, trabajar los fondos y ser espectacular cuando toca. Pero tiene un gran enemigo, que no es su falta de garra (un estilo demasiado industrial) y un talento insuficiente para llegar a donde quiere ir, sino el color. Es el típico de ordenador. Uno que, al buscar el realismo, acartona las figuras y resta dramatismo a la historia de modo que pega continuamente patadas en la espinilla al tosco trabajo de N. Scott ya que acentúa su sosería e hieratismo.
El formato tomo caro (1€ más de lo que costarían si fuesen grapas mensuales Panini) con que se publica esta estupenda serie es un signo más de que vivimos en un mundo injusto. Pues, aunque "Los Seis Secretos" no es la leche sí es una serie superheorica diferente, divertida, sorprendente, interesante, emocionante (una pena lo del tomo, pues el continuará lo maneja muy bien Simone) y que requiere tiempo para ser leída, o sea, da mil vueltas a cualquier serie superheroica que sesté publicando hoy a pesar de questá lejos de ser la mejor dibujada. Por ello, en un mundo justo o ideal, saldría en grapa en nuestro país.
Así pues, este 2º tomo de la serie regular de "Los Seis Secretos" es una interesante y original lectura que confirma questa es la mejor serie de superhéroes que sestá publicando en este país a pesar de que este nuevo tomo no es tan bueno como el anterior. Algo previsible ya que aquel es buenísimo. Aunque esta cole de las reglas del género sólo cumple la del maniqueísmo, es una buena lectura superheroica al complementar un género tradicionalmente blanco y ejemplarizante con su ácido y descreído pero constructivo, inteligente y respetuoso posmodernismo. Además, molan sus protas, molan las relaciones disfuncionales que tienen entre ellos y en este tomo sale WW.
Comentarios
Impacientes Saludos.