Bueno, pues hoy vengo con una post bizarro de estos que de vez en cuando se me ocurren. A simple vista ambas obras no tienen nada que ver, pero creo que estan relacionadas. Para empezar una esta hecha por Moore y la otra por Spiegelman que son, seguramente, los 2 autores de Cómic más importantes de los últimos 30 años. Cada uno haciendo lo suyo han procurado acabar con el prejuicio cultural que margina al Cómic demostrando que este puede ser perfectamente un vehículo para contar historias complejas, intelectuales y humanísticas, en definitiva que, contar una historia con la ayuda de dibujos no impide que esta sea madura, adulta y artística. Ambos lo han conseguido, sobre todo, porque tienen un gran conocimiento sobre el Cómic y por ello dominan perfectamente la técnica narrativa del mismo, más que por tocar temas elevados. Así pues, estos 2 comics salen "de la pluma" de 2 grandes autores, por entonces, en ciernes.
Por otro lado, un simple vistazo a los 2 comics revela que ambos son opuestos en cuanto al dibujo, pero todos sabemos que los extremos se juntan, esto es, son lo mismo. Ver los WildC.A.T.S de Moore es un dolor, no sólo es que en general esta mal dibujado y, sobre todo, mal narrado, es que esta hecho de forma estereotipada. Justo lo contrario que "Breakdowns" que, aunque sus dibujos no destacan por su preciosismo, pero eso es porque no hay ninguna voluntad por hacer algo clásico y académico sino que se apuesta por el expresionismo, sí que es una delicia visual en cuanto que el dibujo, en su sentido más amplio, esta al servicio más que de la historia, de la carga emocional que esta tiene. Por eso es un gusto leer "Breakdowns". Es admirable lo perfectamente ajustados e integrados que estan el guión y el dibujo alcanzando así un todo gesltáltico perfecto. Por eso, comparando ambas obras, se nos revela la importancia del dibujo en el Cómic, pues es una pieza indispensable del Cómic, no sólo es un acompañamiento y por tanto su obligación no es ser bonito o estar a la moda. De modo que comparando el apartado gráfico de ambas obras, podemos ver más claramente el gran daño que hacen al Cómic los supuestos dominantes sobre el dibujo del mainstream estadounidense (considerando este como una comunión entre editoriales y sus clientes entusiastas), pues estan perfectamente encarnados aquí en el trabajo que hicieron un rebaño de dibujantes sobre los guiones de Moore. Un trabajo deplorable que les convierte en seres despreciables, pues tuvieron la suerte de trabajar junto uno de los mejores y no sólo la desaprovecharon, sino que lo embarraron todo. Así que por eso, en mi opinión, estas 2 obras son una pareja de opuestos que forman una unidad.
WildC.A.T.s, Moore y una panda de mancos, Norma 2009. Es, seguramente, el cómic más flojo de Moore, pero no sólo por estar dibujado por unos papanatas sino porque se nota que esta hecho con el piloto automático pero, quién puede culparle? Moore fue contratado en la típica operación para conseguir prestigio que todo torpe advenedizo se ve obligado a hacer. Fue en ese sentido un trabajo mercenario que además, tenía que usar los mimbres creados por gente muy mediocre y estar sometido a un estándar concreto, no había otra, así que es comprensible que adoptase una postura acomodaticia. Pero eso no quiere decir que estos guiones sean malos o mediocres, pues estan por encima no sólo de la media de la época, sino de la actual. Son unos guiones sencillos y modestos, poco originales argumentalmente, pero muy bien contados, tienen buen humor y cierta originalidad, porque Moore incluso capado sigue siendo Moore. El tomo empieza bien, la parte central es la más floja y vuelve a remontar en el final sin alcanzar la calidad del principio. Es una lectura entretenida con pálidos destellos de genio que, en mi opinión, no esta favorecida por la edición de Norma, ya que Moore es un escritor denso, no apto para tochos, y es un tomo incómodo de leer. Por tanto, el ser un integral resta frescura a la lectura (estoy seguro que esto en grapa mensual se disfrutaba más). Como siempre la manía de Norma de convertir todo en una novela gráfica para los fetichistas del lugar no es la mejor edición posible. En fin, el cómic tiene su gracia, para mí que haciéndolo es cuando se le ocurrió hacer Top 10, porque es obvio que Moore encontró en el humor la única manera de motivarse para hacer unos guiones que sabía que tenían que ser mediocres porque no tenía dibujantes sino pintamonas. También, porque el pj TAO es su alter ego. Eso me ha parecido ver en un pj intelectualmente superior y más culto y esotérico que el resto de sus compañeros superhéroes. Un tipo que enreda y tima a sus compañeros aprovechándose de sus puntos débiles, su poca inclinación a pensar y su temperamento violento. Así el cómic de WildC.A.T.S. se ríe de la caricaturas de superhéroes que son los pjs Image y es en eso donde esta el valor del mismo, porque pasado el principio, cuando Moore deja de describir una sociedad extraterrestre con la originalidad y poesía que le caracteriza (ese hotel de las coincidencias por ejemplo), el cómic pierde bastante. Pero es que no podía ser menos contando con una retahíla de dibujantes incapaces de ocuparse de un sólo nº (me pregunto por qué? Image ya tenía los problemas que tienen ahora las editoriales?) y con un estilo que sigue los ineficaces presupuestos jimlianos. De forma que no hay ni narración, ni representación de emociones, sólo una sucesión de pin ups (es increíble los pocos fondos que hay) sin ningún sentido o coherencia que quedan ridículos por eso mismo y porque el guión de Moore va hacia arriba y ellos hacia abajo (un poco como el "Rising Stars" de Stra, el cómic peor dibujado del mundo hasta que pude contemplar este que nos ocupa). Alguno se salva de la quema, pero la mayoría, incluso siendo grandes dibujantes como Charest, hacen un trabajo deplorable porque dibujar comics no es sólo dibujar figuras bien y los guiones de Moore exigen algo más de 4 viñetas sin fondo y pjs posando frívolamente. Así que el resultado es un cómic que en la edición de Norma es demasiado caro para adquirirse. Pagar por esto 28€ del tirón es psicológicamente inasumible. Lo malo, en dosis pequeñas, se tolera mejor.
Breakdowns, A. Spiegelman, Mondadori 2009 es un cómic experimental. Pero esto no quiere decir que sea abstracto, conceptual o ininteligible. Es un cómic perfectamente entendible que, como obras posteriores de este autor, son tanto una exploración del medio como de sí mismo. De esta forma, al igual que "Maus" (que a mi me parece que es lo que es porque es una historia sobre el genocidio judío), "Breakdowns", que a mi me ha gustado mucho más, es un exorcismo de los angustiosos traumas que tiene el autor habida cuenta de su infancia pasada en un ambiente enfermizo y claustrofóbico. Así pues, paralelamente al exorcismo de los demonios que habitan en el alma de Spiegelman, asistimos a una exploración del Cómic. El objetivo no es sólo purgarse, sino también entender el Cómic, pues sin ese entendimiento hacer un cómic es imposible. Hay que conocer todos los resortes y las claves del mismo para poder atraverse luego a hacer obras ambiciosas, obras alejadas de la vulgaridad pop que ejemplifica muy bien la anterior obra comentada. Así, en sus historias cortas pero con un hilo común tanto psicológico (su relación con su madre suicida, que le tortura incluso tras la muerte al no haber dejado explicación de su último acto) como teórico, Spiegelman experimenta con el tiempo narrativo, con la estructura de la historia, con los pjs, etc. para descubrir como es la mejor forma de abordar una historia en cómic, cual es el mecanismo que hace funcionar conjuntamente y en armonía dibujo y letra. Así, en sus páginas encontramos hallazgos muy parecidos a los de Moore y Gibbons (no creo que estos conociesen la obra de Spiegelman pues era muy difícil de conseguir antes del arroyador éxito de "Maus") en "WATCHMEN". En concreto hay una historia cuyo estilo recuerda mucho al episodio nº 9, "La oscuridad de la existencia". En suma, una lectura interesante, didáctica, entretenida, divertida y simpática a cuenta del Cómic. Una obra donde podemos encontrar auténticas obras maestras (toda una biografía contada en 4 viñetas con una combinación diferente de los mismos elementos) y a una persona simpática y humilde a pesar de ser ambiciosa y temeraria. Así que es de agradecer contar con obras así en el mercado español sobresaturado de obras comerciales y pop, que no estan mal si se dan en su justa medida, porque obras como "Breakdowns" son las que nos permiten crecer como lectores y por tanto nos hacen más capaces de entender, ergo, apreciar el Cómic, al ser las que nos revelan su mecanismo.
Comentarios
curiosamente de los wildcats de moore lo que mas recuerdo es que los dibujos eran un dolor de cornea, realmente por lo menos ameritaba que a moore lo dibujara jim lee, pero bueh, que se le va a hacer. no me parece ni de lejos el mejor trabajo del guionista pero tp el peor (supreme esta mejor considerada pero a mi no me gusto, prefiero esta lejos...); me parece gracioso que aun a media maquina sea la mejor y mas recordada etapa de la coleccion y que generara conceptos que hoy son claves en esa linea editorial. como mr. majestic que toma en esta etapa dimensión como personaje, tao, la mina con la mandibula robotica que no me acuerdo como se llama, etc.
ah y una ultima cosa yo pensaba que moore era un genio sin igual, que sus trabajos estaban llenos de una poesía inigualable... hasta que leí a borges. saludos. te paso la dirección de mi blog a ver que te parece.
www.malditocerrado.blogspot.com
La chica cubérnica, Maxine creo, esta muy bien, un humor facilón pero que funcionaba muy bien lo que la convertía en el pj más simpático de todos.
A Borges no lo he leído mucho, pero seguro que tienes razón.
www.malditocerrado.blogspot.com