Tras una lectura completa y seguida de este increíblemente modesto crossover, paso a criticarlo.
Lo primero decir que las expectativas que tenía le han perjudicado. Con todos los blogueros en el extranjero diciendo que esto era la bomba, yo me esperaba un gran cómic de superhéroes y no es así. El crossover no pasa de correcto, aunque va de menos a más. De todas formas, es un cómic muy orientado a los fans de los GL, así que son ellos los que realmente pueden calibrar lo que esta historia supone.
El argumento es sencillo y esta ya muy visto, los archienemigos de los CLV por fin deciden unirse y configurarse como la auténtica némesis del cuerpo al crear los Siniestro Corps, que es como el CLV, sólo que con la pretensión de hacer bien infundiendo miedo, además de ser muy ambiciosos, ya que en vez de limitarse a hacer la competencia al CLV, deciden reconfigurar el Universo, siendo esta intención donde reside el verdadero conflicto, pues los LV, como buenos superhéroes que son, son defensores del status quo y por tanto, se oponen a cualquier cambio.
La historia de Johns es la 2º de 3 (la 1º es la de Renacimiento, ya publicada por pda en un tomo, por lo visto, mal traducido y la última, si no me equivoco, aún esta por llegar en los EE.UU.), por lo que calibrarla totalmente todavía no se puede hacer. Así que centrándome en este larga historia (12 grapas y un especial) digo que Johns sigue en su línea de guionista competente que de vez en cuando tiene un fogonazo de genialidad en forma de idea brillante (por ejemplo los SC, que es tan buena, que me extraña que a nadie se le haya ocurrido antes). Así, su historia se desarrolla coherente y sólidamente pero de forma muy convencional, lo que le resta emoción y tensión y la convierte en una más del montón, en una muy importante para la historia de los LV, pero en intrascendente para el género (a no ser que por su calidad, para ser un crossover, y su modestia, se convierta en un ejemplo a seguir). De esta forma Johns y adláteres (entre ellos Gibbons, que me parece el que mejor lo hace) desarrollan una historia, más bélica que superheroica, con su puntillo épico, que a estas alturas ya esta muy visto, que va ganando en interés conforme avanza y que tiene un final bastante sorprendente y con cambios dentro de su previsibilidad (ganan los buenos y ningún pj importante la palma).
Así pues lo destacable de esta historia no puede ser el trabajo modesto de sus guionistas, sino algunos temas que Johns toca en ella. El principal es el de la fuerza letal. Un tema que esta un poco de moda ahora en DC, me refiero al tema de que un superhéroe mate. Como lector criado en los superhéroes clásicos, que uno de estos mate, me parece una aberración, pues va contra todo principio y costumbre, pero aquí creo que esta bien traído. Ya que, realmente, los LV no son superhéroes sino policías (aunque creo que lo son asumiendo una autoridad que nadie les ha otorgado), así que es lógico que puedan utilizar la fuerza letal como autodefensa y forma de detener a los malos y además, se trataba de salvar al Universo, así que no cabían medias tintas. De todas formas, la revolucionaria idea de Johns esta aún en ciernes. Como la historia aún no ha terminado, aún no se sabe cuales van a ser las repercusiones de la misma. Se quedará para siempre o es el primer error que los guardianes han cometido? Aún es pronto para juzgar esta saga, ya que aún esta por ver si es una metahistoria (es decir, una reflexión sobre el mundo actual y el papel de EE.UU. como policía mundial y defensor de unos valores concretos que no son universales), o en realidad es una historia más de superhéroes, hecha para entretener y ya. De todas formas, hay varias ideas que serían muy interesantes de desarrollar como la de Siniestro y su miedo, pues es una herramienta que indirectamente utiliza toda policía y por extensión los LV, el miedo a la cárcel (y a la pena de muerte en el caso de EE.UU., Irán y otros países), a que te pillen, en definitiva, a la poli.
Gráficamente el crossover es dominado por Reis. Un competente dibujante con un estilo idealista severo que es una mezcla del de J. Buscema y el de Davis. Un estilo no muy llamativo pero muy competente, pues Reis domina la anatomía y es capaz de dibujar cualquier cosa, su punto flaco es la narrativa, ya que no es muy allá y no aprovecha a fondo las posibilidades de un dibujante muy trabajador (un tesoro en estos días) y que domina perspectiva y anatomía. No bstante, para mi el mejor es Gleason porque, aunque es un dibujante menos virtuoso que Reis, tiene un estilo más personal y llamativo y una capacidad estética mayor. Por eso sus páginas (desgraciadamente no hace ninguna grapa entera) son las mejores de todo el crossover, sobre todo, las del penúltimo número. La pelea superheroica que dibuja Gleason es una de las mejores que he visto, gracias a que este dibujante se sale con su estilo sintético, su gran narrativa, su sentido de humor macabro y su gran dinamismo y expresividad, de forma que, convinándose con el estilo clásico y estático de Igle, que es su perfecto contrapunto, convierten a la susodicha grapa en el mejor número de la serie gracias al contraste que produce el cambio de estilo de los dibujantes (y la trama de la historia) y la tensión y la ultraviolencia que Gleason dibuja. Así pues, también en el dibujo es una historia más a pesar de que tiene sus fogonazos.
En fin, pues eso una historia relativamente entretenida que sólo empieza a merecer la pena a partir de su tercio final, pero que al ser parte de un plan más ambicioso y tener alguna idea revolucionaria deja con muchas ganas de ver como termina esto. Y es que Johns no es muy brillante, pero es el único que sabe como cambiar y desarrollar un concepto sin pervertirlo o traicionar un género.
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