De tooooooodas (léase con ironía) las grapas que saca Panini, estas son las 2 únicas que compro. Aún así, son el doble de las que compraba el año pasado y seguramente, hacía años, desde el última Gran Extinción tras fracasar la mutación back to the basics, que no compraba tantas. Yuju! (léase con ironía).
Thunderbolts nº 1, W. Ellis y M. Deodato, Panini 2008. Paradójicamente, cuando estos thunder se merecen el apelativo de nuevos (o algo que los distinga de los anteriores) es cuando lo pierden. Este número inicia otra etapa rupturista, cosa que, aunque era muy necesaria, no precisaba que cambiase el espíritu de la colección (redención y villanos civilizados). Por ello, aunque acogía favorablemente este truco de trilero (mismo envoltorio, distinto contenido), no esperaba nada de él, ni siquiera tenía ideas preconcebidas. Quizás por ello el número me ha parecido bien. No es ninguna maravilla, obviamente. Ellis escribe con el piloto autómatico puesto, así, él no se tiene que comer la cabeza intantando hacer algo diferente y los lectores transitamos por territorios desgastados de lo hollados que estan, pero que, gracias al oficio del piloto, resultan gratos. Y es que este número no tiene nada de original, es un ejemplo perfecto de los comics que se hacen ahora. Esta plagado de esquemas típicos, dilataciones argumentales, lugares comunes y convencionalismos. Sólo, quizás, la única implicación personal de Ellis en el guión, sea el cargar las tintas en la carácter villanesco de los pjs, para dejar en evidencia el despropósito que es la colección (sociópatas y psicópatas En la parte gráfica nos ha tocado un Deodato (tengo entendido que son un estudio, o igual esos eran los de los 90) burdo y tosco. Un tipo que se ha olvidado de aprender a dibujar, porque piensa que con manejar referencias fotográficas basta. Sólo hay que ver este cómic para darse cuenta de que no, pues el dibujo es totalmente irregular, al lado de conseguidos dibujos (de planos medios para arriba lógicamente) con leve tufo al estilo de los 90 (sexista y metrosexual), hay dibujos dignos de un infante, con lo que el acabado final resulta esquizofrénico e impide el asiento del lector. Narrativamente es igual, buenos y ágiles momentos con soluciones pésimas. Pero, sabe crear atmósfera manejando las sombras con una inteligencia y una capacidad inusitada en un cómic de superhéroes, lugar donde dibujantes y coloristas no suelen saber de iluminación. Este aspecto sombrío se conjuga perfectamente con el excelente color informático de R. Beredo. Este, interpreta muy bien el dibujo de Deodato y el espíritu de la cole, dándole un aspecto final atractivo y sugerente, que destaca sobre el resto de las series del UM. Así pues, queda un número profesional, sólido y eficiente, donde se conjugan perfectamente palabra e imagen. Creo que esta etapa no tardará en acabar. No me creo que una sociedad tan mojigata y moralista como la de EE.UU. soporte durante mucho tiempo, una cole tan pasada de rosca y donde se demuestra que el mal compensa. Además, no creo que Ellis y Deodato se queden mucho por aquí. Por cierto, no es estúpido que, pjs de ficción con años y años a sus espaldas, se parezcan de pronto a un actor? Qué intenta hacer con eso los dibujantes? No es ridículo que un mismo actor sea el rostro de diferentes pjs? A ver si se pasa la puta moda de una vez.
Runaways nº 11, J. Whedon y M. Ryan, Panini 2008. Este número me ha parecido mejor que el anterior. Aunque a mi el tono de la serie me recuerda más al Buffyverso que al UM, la cole sigue conservando la frescura y divertimento que cultivó Vaughan en su etapa. Whedon no se come la cabeza con el argumento, pero como hace en la tv, es capaz de dotar de interés una historia manida gracias al humor, las sorpresas y una buena caracterización de pjs. También hay que agradecerle que le haya dado más papel a Molly. Por su parte Ryan se muestra como un dibujante verde pero con futuro. Su dibujo es hierático y limitado en recursos, pero eso se mejora trabajando. En cambio, su buena narrativa es más de talento que de experiencia, por lo que lo más difícil lo tiene. Naturalmente, lo bien que queda en la cole se debe a la colorista Strain que, con un color suave y sencillo, imprime mucha vitalidad al cómic y ayuda a estar más presentable (como el maquillaje) al dibujo de Ryan, que aún no tiene muy claro como simular tridimensionalidad, sobre todo si no dibuja los pies de sus pjs. De este modo, este número es otro buen y satisfactorio número de esta cole, con lo que consigue mantener el buen nivel que tiene desde hace poco más de 2 años, todo un logro para los estándares actuales. A destacar sobre todo el desarrollo, con consecuencias sorprendentes pero lógicas, de el trasfondo de El Orgullo por parte de Whedon y la vuelta de un continuará tan emocionante como los de Vaughan. Por cierto, nuestro número 14 ha salidoe ste mes en EE.UU. Cuál es el futuro de esta serie? Se congelará? Pasará a tomo (diso no lo quiera)?
Comentarios
los personajes se han convertido en psicópatas sin sentido.
Al menos el otro intento no había los Thunderbolts y se podía leer
Advertencia: Si eres fan Thunderbolts, no te los compres.
Aunque tengo Zemo Born Better en inglés cuando salga el tomo por Panini me lo compraré y así acabaré la colección con un buen epílogo.
Bueno, veremos que pasa al final con la cole. Yo veo que su premisa es insostenible, pero bueno lo mismo se decía de los bendisdores y allá van por el número 4x.
Yo personalmente deje la serie en el tomo con los vengatas justo antes de que empezarán a ser nuevos, porque me dio una sensacion de conclusión que diriamos
¿Alguien sabe cuantos numeros han salido en EE UU?. Porque creo que ya ha tenido un parón importante, y que nadie sabe que pasa con Ellis, pero que le está pasando con todos sus proyectos.