Nihei es el autor de "BLAME!", un manga fascinante y alucinante con el que disfruté mucho, tanto por su calidad como por su originalidad. Por eso encumbré a este autor. Pero con "Lobezno: Snikt!", "Biomega" y "Abara" se me ha caído un mito. No es que Nihei sea malo. Al contrario, es un mangaka completo muy competente, lo que pasa es que, entre que ya no es novedad, que como autor se repite mucho y lo esqueléticas que son sus historias, ya no mola tanto. Es decir, es un autor que ha creado un universo endogámico, lo que le ha hecho perder frescura, originalidad y, sobre todo, interés.
"Lobezno: Snikt!" es un cómic flojo y vacuo. "Biomega" no esta mal, aún hay que esperar su final, es una historia bastante convencional que, al estar bien contada, mantiene su interés. Pero "Abara" (2 tomos) es mediocre, lo mismo que la historia corta "Digimortal" incluida en esta edición de Panini para cuadrar páginas y precios (ya saben que las editoriales han perdido la flexibilidad de antaño por la que podían alterar el precio y el nº de páginas de una misma publicación).
"Lobezno: Snikt!" es un cómic flojo y vacuo. "Biomega" no esta mal, aún hay que esperar su final, es una historia bastante convencional que, al estar bien contada, mantiene su interés. Pero "Abara" (2 tomos) es mediocre, lo mismo que la historia corta "Digimortal" incluida en esta edición de Panini para cuadrar páginas y precios (ya saben que las editoriales han perdido la flexibilidad de antaño por la que podían alterar el precio y el nº de páginas de una misma publicación).
No se puede contar de que va "Abara" (costillas) porque no va de nada. Nihei establece un argumentillo pero no es más que un macguffin para que el lector llegue hasta el final.
Uno de los secretos del éxito de Nihei es el misterio. Uno de los principales impulsos del lector es el seductor misterio de las historias de Nihei. Lo que pasa es que ese misterio siempre es un misterio ya que nunca es resuelto. Sus obras nunca nos cuentan como empezó todo y como terminó. Tampoco el porqué de muchas cosas que acontecen a lo largo de la lectura. Creo que ni Nihei sabe las respuestas a los misterios de sus obras. No le importa. Tampoco es que sea necesario que se resuelva el misterio de una obra para poder disfrutarla. Lo que pasa es que para eso esta ha de ser excelente, porque si no, la dificultad del lector para meterse en la historia le acaba llevando al aburrimiento. Pero esto no es solo lo que pasa en "Abara", porque además hay una historia que tiene los mismos elementos que "Lobezno: Snikt!", "BLAME!" y "Biomega", lo cual ya aburre por repetición, y además, a diferencia de las otras obras, no hay un protagonista al que seguir o, que al menos, su carisma motive al lector a seguir sus aventuras, ni hay asideros para que el lector se monte una película en su cabeza que le espolee a seguir la historia. El colmo llega con "Digimortal". Tras leer la decepcionante "Abara" con un final ininteligible que parece producto de una huida hacia delante de un Nihei condenado a contar historias aun cuando no las tenga (teoría que cobra fuerza con el hecho de que "Abara" es una historia escrita para publicar algo mientras el problema editorial que le impedía continuar con su "Biomega" se resolvía), nos encontramos más de lo mismo pero en muchísimas menos páginas, si bien es cierto que pone 1º parte, por lo que la broma puede que siga. Así, tras la lectura, el sopor y la mala sangre asociada al pensamiento "por qué lo he comprado?" es insufrible (a lo mejor no debí leer los tomos seguidos).
Con "Abara" me queda claro que Nihei sigue un esquema, por lo que su estatua cae. Nihei pone un párrafo explicativo al principio que describe muy básicamente el contexto donde va a transcurrir la historia para, acto seguido, presentarnos un monstruo, del que no se nos dice nada, que se va enfrentar a otros monstruos, por vagos pero poderosos motivos que convierten a estos últimos en malos, lo que justifica la subsiguiente masacre, y ya. Eso es todo. Y es escaso aunque todo este adornado con lo que a estas alturas se muestra como los fetiches de Nihei: futuro tan lejano que el pasado se ha olvidado, megacorporaciones privadas malvadas, tecnología arcana de destrucción masiva, cierta influencia de la Nueva Carne, misterio que no es más que ausencia de historia y pjs dignos de un spaguetti western. Si esto en "BLAME!" funcionaba a la perfección porque la historia era una búsqueda y parte del interés era ver si el prota iba a encontrar algo o no y por eso no importó que al final no sepamos qué encontró y si eso le sirvió de algo (se puede conjeturar pero no aseverar), y en "Biomega", de momento, una mejor caracterización de los pjs llena el vacío. En "Abara", como en "Lobezno: Snikt!", no funciona por insuficiente y reiterativo.
Es muy probable que Nihei sea un autor de sensaciones (no es caprichoso el que su estilo sea expresionista). Un autor que no quiere contar historias, sino provocar sensaciones. Para eso tiene muchas aptitudes: un dibujo impactante, un entintamiento muy competente, una narración tan sobresaliente que le permite ser muy lacónico (aunque claro, como no hay nada que contar ...) y una imaginación visual tan original como limitada (sus monstruos, aunque espectaculares y ominosos, son prácticamente los mismos en todos sus mangas, sus escenarios lo mismo). Pero eso no basta. En "BLAME!" había algo más que conseguía conmover al lector en cada tomo. Pero aquí no hay nada porque lo poco que hay es lo que Nihei ha convertido en convencional o en cliché y eso no transmite. Así que "Abara", a pesar de no ser mala por el espléndido, pero ya poco original, trabajo visual de Nihei, es fallida al no tener entidad y, por tanto, ser demasiado débil para impactar.
Así pues, el apartado gráfico de "Abara" es la parte más sobresaliente del manga. Aunque se mide en los mismos parámetros que sus otras obras, lo cual ya no es novedoso ni fresco a los ojos del fan, sí hay una mayor elaboración de los rostros, un esfuerzo mayor por acercarse a las proporciones humanas y algún destello de originalidad. Con todo ello confirma más que demuestra, que Nihei es un autor de Terror muy competente en lo gráfico. Su dibujo, que se basa en los acusados contrastes entre los garabatos y las manchas, entre el blanco y el negro, entre su estilo expresionista y la inexpresividad de los pjs, entre las arquitectura, mixtura entre la de los rascacielos y la ecléctica, ciclópea y apabullante y sus pequeños moradores, entre la fragilidad de sus pjs y lo terrorífico de sus monstruos, entre la quietud de los escenarios vacíos y la tensión de los combates ultraviolentos y entre el ritmo lento dominante y la rapidez con la que transcurren los acontecimientos (sus comics son largas transiciones punteadas por breves pero intensas y, sobre todo, espectaculares escenas de acción), que dan a sus mangas un aspecto inquietante y extremo muy atractivo y singular, en la perfecta captura con el lápiz de los elementos visuales del cine de Terror actual (estética gótica, gemelos, niños inquietantes, metamorfosis, androginia ...) y en un voluntario expresionismo, es excelente para el género enfocado a no ocultar nada, a acongojar mostrando tanto, la violencia, la muerte y los monstruos en todo su morboso y truculento esplendor, como la desolación más absoluta (algo potenciado por la falta de expresividad y el laconismo de los pjs y el manga). Un dibujo sobresaliente que no esta solo, pues esta muy bien apoyado por una narración cinematiquísima soberbia que resulta hipnótica. La escena del 1º combate de "Abara" es una obra maestra del bullet time y prueba que uno de los talentos de Nihei es su capacidad para cambiar el ritmo y sostener o dilatar, a lo Leone, los acontecimientos.
La edición de Panini es ambigüa. Por un lado su tamaño mayor del habitual y su precio ajustado la hace buena, mejor que la que esta teniendo "Biomega" que, al ser pequeña, perjudica sin razón alguna al fantástico arte de Nihei y, con ello, a la funcionabilidad del manga ya que no es significativamente más barata (1.5€) y tiene el mismo nº de páginas (216). Pero por otro lado seguimos teniendo que ver en b&n páginas o ilustraciones en color (cojones pa eso no las publiquéis) y se me ha despegado parte del 2º tomo, aunque esto último puede haber sido algo puntual que ejemplifica lo suertudo que soy, puede no serlo. Así que tengan precaución a la hora de leerlo.
La edición de Panini es ambigüa. Por un lado su tamaño mayor del habitual y su precio ajustado la hace buena, mejor que la que esta teniendo "Biomega" que, al ser pequeña, perjudica sin razón alguna al fantástico arte de Nihei y, con ello, a la funcionabilidad del manga ya que no es significativamente más barata (1.5€) y tiene el mismo nº de páginas (216). Pero por otro lado seguimos teniendo que ver en b&n páginas o ilustraciones en color (cojones pa eso no las publiquéis) y se me ha despegado parte del 2º tomo, aunque esto último puede haber sido algo puntual que ejemplifica lo suertudo que soy, puede no serlo. Así que tengan precaución a la hora de leerlo.
En fin "Abara" es una obra fallida y mediocre por lo que sólo es apta para fans acríticos del autor o del subgénero de Terror Cyberpunk. También para un rápido y barato acercamiento a Nihei para calibrar si es del gusto de uno sin tener que seguir una cole de varios tomos. Una obra decepcionante para los que flipamos con "BLAME!". Una obra que no aporta nada a pesar de que ayuda conformar el Niheiverso. Un ejercicio de estilo que sirve para dar salida a descartes de historias.
Comentarios
Por otro lado me permito recomendarle (ya que me tratas de vd:) Asa el ejecutor ya que no la menciona. Hay algun que otro post en este blog. Es una obra, esta de Asa, impresionante y única.
Bueno Skarloc, si te fascinaron esos elementos en Snikt! entonces creo que te gustará BLAME! que es lo mismo pero mucho mejor.
Gotico, prefiero el tuteo pero no me importa que nos tratemos de vd :P
Con Crying lo flipé cuando salió por 1º vez aquí (1º mitad de los 90). Cuando por fin 15 años después pude leer la continuación me pareció malísimo. Así que recomiendo precaución.
De Dragon Head ni idea, no es que no la haya leído es que ni siquiera me viene una imagen.